Tarazona

¿Cuál es la tendencia en trajes de ceremonia? (novio, novia y comunión)

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Mª Ángeles Mena y Mª Cruz Pérez. Banity

Dejarse asesorar por profesionales con años de experiencia a la hora de elegir nuestro traje o vestido de novia es siempre una buena opción. Ellos nos ayudarán a decantarnos por aquel que más se adecúe a nosotros y a nuestras necesidades, evitando de esta forma los errores más frecuentes. El catálogo existente en la actualidad es amplísimo y las posibilidades infinitas. Tan sólo es cuestión de dar en el clavo.

Rodas (Corella). Ascensión Ochoa

“La colección de novias va desde el estilo clásico al moderno. El clásico con telas muy nobles, muy ricas y ligeras. Es decir, con mucho movimiento y con bordados. Como mucha seda natural, cortes muy limpios y con volantes. La tendencia son los volantes, también mucha capa. Cada vez más, el vestido pierde volumen y viene más pegado, marcando más la silueta de la mujer y de una línea totalmente femenina. También, mucho escote, tirante fino, tirante ancho y palabra de honor, pero con mucho complemento, mucho bolero, mantilla, velo, etc. Nada de manga, todo como muy escotado. Y en colores naturales, desde el blanco roto hasta el marfil.

En el caso de los chicos, viene la americana un poco más corta y entallada, trajes un poco ajustados, digamos, y en tonos oscuros. Como con un aire italiano, más modernito o más juvenil. Las telas se convierten, básicamente, en las protagonistas de estos trajes ya que son satinadas, haciendo rayitas o brillos. Todo esto combinado con complementos, como los gemelos, que vienen mucho, y con la consiguiente camisa blanca o de color. El chaleco, viene también de diferentes colores.

Este año es el primero en que hemos incorporado un apartado de comunión a nuestra colección y nos hemos decantado por los vestidos un poquito más clásicos, de lorza, con el típico cuello bebé y en seda natural. Para los chicos, almirante y marinero”.

“En mi caso, no sigo la pasarela, no es mi criterio porque no tienes un público como para esos vestidos tan espectaculares, son una preciosidad pero no dejan de ser de pasarela. Yo con lo que trabajo mucho esta temporada es con los encajes, de todo tipo, tanto de chantilly como rebrodé; con poliéster, seda… También los rasos, que no se han dejado nunca. Trabajamos los llamados de duquesa o raso real, que es de una calidad estupenda y con mucha caída. Igualmente, todo tipo de sedas, los tules de seda, que son una verdadera maravilla. Siempre todo ello con un poco de fantasía, un poquito, porque para uno que vendes de mucha fantasía, vendes 30 que no la tienen. En colores tengo desde unos tostados de macramé preciosos, hasta lilas mezclados con marfil, granate con encajes preciosos… Éste último color es el típico vestido de escaparate que todas se prueban pero con el que ninguna se atreve. En cuanto a las formas, desde un vestido de mucho volumen, al corte sirena, estilo imperio… el abanico de posibilidades es enorme. Para cualquier chica, de todas las edades, tenga el tipo que tenga. A veces, vienen con una idea fija y se lo prueban y no les gusta. Yo intento asesorarles y lo que siempre les digo es que se prueben lo que les guste pero también algo que no les guste nada, porque puesto en ellas puede cambiar totalmente.

De repente igual se lo ven puesto y dices: este es tu vestido, por el brillito de sus ojos, les cambia la expresión”.