Navarra

Más eficiencia al alcance de cualquier hogar

En zonas de veranos calurosos e inviernos fríos el aislamiento térmico, junto al autoabastecimiento fotovoltaico, es quizás una de las mayores formas de hacer que una vivienda convencional sea una casa ecológica.

Edificio vecinal con placas
photo_camera Edificio vecinal en Navarra con una instalación fotovoltaica comunitaria

La realidad del cambio climático y el encarecimiento de la energía invitan a la ciudadanía a ponerse manos a la obra en hacer de su vivienda un lugar más ecológico y eficiente energéticamente. Esto es posible de conseguir no solo con grandes obras sino con sencillas modificaciones de bajo coste y las que no lo son tanto se compensarán en poco tiempo por el ahorro económico en las facturas eléctricas, gracias al incremento de la eficiencia energética de la vivienda.

Son muchas las opciones y para destacar los ámbitos más importantes se recomienda hacer intervenciones en el ámbito de fuentes de energía, aislamiento térmico y acústico, iluminación y fontanería.

Fuentes de energía

Actualmente existen subvenciones de Gobierno de Navarra para facilitar la instalación de placas solares en viviendas unifamiliares o bloques de vecinos, asimismo comienzan a florecer las comunidades energéticas en las que los ayuntamientos facilitan al vecindario la energía solar colocando placas en edificios municipales.

Para tener una casa ecológica y con buena eficiencia energética, lo primero es plantear la independencia energética a través de fuentes sostenibles, como la fotovoltaica o la eólica teniendo en cuenta que es una prioridad ocupar los espacios habitados en poblaciones y respetar los medios naturales. Actualmente existe una saturación de parques eólicos en Navarra que está poniendo seriamente en duda la normativa al respecto por la falta de sostenibilidad medioambiental que suponen.

Para que la vivienda sea más sostenible y con mejor eficiencia energética también hay pequeñas cosas que se pueden cambiar y producen resultados notables, por ejemplo, en la iluminación sustituyendo los bombillos tradicionales por las LED. 

También, sustituir todos los electrodomésticos que tengan baja eficiencia energética, ya que consumen más electricidad y agua, por los que tengan la etiqueta energética A y la flor ecológica europea. 

Reforma de aislamiento térmico y acústico

En zonas de veranos calurosos e inviernos fríos el aislamiento térmico, junto al autoabastecimiento fotovoltaico, es quizás una de las mayores formas de hacer que una vivienda convencional sea una casa ecológica energéticamente eficiente. 

Ya que uno de los mayores gastos energéticos los produce el mantener la vivienda fresca en las estaciones cálidas y viceversa en las más frescas. 

Hay pequeñas reformas o detalles para hacer un hogar más sostenible como mejorar las ventanas. Se recomienda usar de doble vidrio, ambos con 4 mm de grosor, y una cámara de aire de 10 mm. Si está rellena de hexafluoruro de azufre (gas SF6) se obtiene un mejor aislamiento térmico y acústico. 

También es importante evitar los puentes térmicos que crean condensación y en cuanto a materiales los tres materiales más usados, por orden de mayor aislamiento térmico, son PVC, madera y aluminio (con rotura de puente térmico). 

Pero, para avanzar hacia una casa más ecológica, la mejor opción sería la madera, ya que el PVC en su fabricación y materiales no es muy ecológico ni reciclable.

Reducir el consumo de agua y mejorar su calidad

Uno de los factores que más pueden afectar la salud son las tuberías de plomo y las soldaduras de cobre antiguas que contaminan el agua. Las de PVC no emiten residuos, pero es uno de los plásticos más difícil de reciclar. 

Existen otras más ecológica como las de acero inoxidable, polietileno o polipropileno, que son plásticos mucho más amables para el medio ambiente.

Sin embargo, los sistemas de ahorro de agua en la cisterna del váter con descarga controlada y los filtros de ahorro (pulverizadores) en todas las griferías son la opción más rápida y asequible.