El pasado fin de semana, Fustiñana casi se quedó sin gente. Un millar de vecinos partieron rumbo a las localidades de origen de los santos Justo y Pastor para unirse a la conmemoración del XVII centenario de su martirio, celebrada en Tielmes, el pueblo que les vio nacer, y Alcalá de Henares, donde ocurrió la tortura . Una vez más, los fustiñaneros dejaron constancia del gran cariño que profesan a sus patronos, cuyas imágenes viajaron con ellos .
Un total de 13 autobuses, más vehículos particulares tomaron parte en esta expedición que, una vez concluida, ha sido muy positivamente valorada por la mayor parte de los participantes.
Los fustiñaneros, ataviados en su mayoría con los colores blanco y rojo, se integraron completamente en la conmemoración y recibieron una calurosa acogida por parte de los anfitriones del evento. En el programa de actos hubo de todo: desde actos religiosos y procesiones, hasta comidas multitudinarias. Pero sobre todo hubo música. A animar los pasacalles contribuyó la Banda de Fustiñana, pero también los auroros pusieron su granito de arena interpretando la aurora y el Himno a los Niños.
