La Plataforma Casco Histórico de Tarazona (PCHT) viene denunciando el progresivo deterioro al que está sometido desde hace décadas el Casco Histórico de la ciudad. Debido a los recurrentes derrumbes y desprendimientos de los últimos meses la plataforma vecinal ha decidido visibilizar su deterioro mediante pancartas en los balcones que sirvan para involucrar a las Administraciones Públicas en su rehabilitación.
La problemática ha obligado al ayuntamiento de Tarazona a cortar un número importante de calles de manera temporal a lo largo del último año y medio, como la calle Cienflorines o la calle Ancha de San Bernardo. Actualmente todavía permanecen cortadas las calles Judería, Rúa Alta de Bécquer y las escaleras de la calle San Niñer, que llevan bloqueadas dos años por una casa semiderruida. La Plataforma denuncia que todo ello perjudica a los vecinos de estas zonas en su día a día, quienes deben dar rodeos para desplazarse por la ciudad, afectando también puntualmente al tráfico rodado.
Para concienciar de esta situación, la PCHT ha diseñado una pancarta azul, color de la bandera de la ciudad, con el texto SOS Casco Histórico Tarazona y ha animado a los ciudadanos a colgarla en sus balcones. De esta manera, pretende visibilizar el problema y movilizar a las Administraciones Públicas para que tomen medidas.
El ayuntamiento contrató en 2021 a un despacho de urbanismo, arquitectura y paisajismo para la redacción del Plan Estratégico del Casco Histórico. Desde la Plataforma apoyan la iniciativa y añaden que “el equipo redactor está realizando un buen trabajo, contando con las asociaciones y ciudadanos interesados”. Sin embargo, el Casco Histórico de Tarazona requiere de medidas urgentes según la PCHT, “en algunas zonas muy degradadas no pueden esperar a que este Plan Estratégico se ponga en marcha, puesto que son numerosos los edificios que corren el riesgo de desaparecer si no se actúa” y exigen al Consistorio “más ejecuciones subsidiarias para consolidar las viviendas más deterioradas”.
Asimismo, la Plataforma recuerdó que el Casco Histórico de Tarazona es Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1965, máxima protección posible en la legislación española. Esta catalogación obliga a propietarios y Administraciones Públicas a su conservación integral.
Sin ayudas públicas para rehabilitación
En palabras de Javier Navarro, unos de los portavoces de la Plataforma e historiador, “el 95% del patrimonio lo conforma la arquitectura popular. Sin embargo, no cuenta con ayudas públicas específicas para su rehabilitación. Equivocadamente la ciudadanía identifica como patrimonio solo aquellos edificios monumentales, pero la arquitectura popular vernácula también lo es. Necesitamos cambiar la mentalidad”.
Por otro lado, Adrián Villarroya, también portavoz de la Plataforma e historiador, señala que “el Casco Histórico de Tarazona es un referente de la arquitectura mudéjar de ladrillo, teja árabe y adobe. Sin embargo, en las últimas décadas se han perdido numerosos edificios tradicionales, y si no se actúa con urgencia corremos el riesgo de perder lo que queda.”
Sobre la Plataforma Casco Histórico de Tarazona (PCHT)
La Plataforma Casco Histórico de Tarazona fue creada en agosto de 2020 y agrupa a ciudadanos preocupados por el deterioro del Casco Histórico de Tarazona. Su objetivo es recuperar la vida de los barrios tradicionales de la ciudad, mejorando el entorno urbano y social, y conservar las características vernáculas que en el siglo XX le valieron la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC). Para ello, elabora propuestas y peticiones dirigidas a todas las Administraciones Públicas implicadas y promueve el conocimiento ciudadano sobre la arquitectura vernácula popular.
