Alrededor de cien personas provenientes, entre ellas de Tudela, Cortes, Futiñana, Corella, Murchante, Cabanillas, Castejón, Cintruénigo, Falces, Villafranca, Caparroso, Tafalla y los valles de Salazar y Roncal han unido sus fuerzas con un objetivo: “el definitivo desmantelamiento del polígono de tiro de las Bardenas”.
El primero de los pasos para conseguirlo fue hacer público un manifiesto realizando un llamamiento a la sociedad ribera en particular y a la sociedad navarra en general, al que seguirán una recogida de firmas y la petición de una reunión con José Antonio Gayarre, presidente de la Comunidad de Bardenas, para “intentar convencerle de que cumpla con el mandato del pueblo navarro”.
La cercanía de la finalización del contrato entre el Ministerio de Defensa y la Junta de Bardenas hace “que tengamos que movernos desde ya, porque nos da la sensación de que ya están negociando, aunque sea a escondidas”, indicaba el portavoz de la iniciativa, Ángel Rincón. “Exigimos que se cumplan los acuerdos del Parlamento de Navarra y de la mayoría de los Ayuntamientos riberos, solicitando el desmantelamiento. (...) para que nadie utilice nuestra tierra para defender con sus ejércitos los negocios de las grandes multinacionales que dominan el mundo, culpables de la muerte y destrucción de nuestro planeta Tierra”, indicaban en su manifiesto.
