La cigüeña sobre la Colegiata de San Miguel es la imagen de Alfaro. Y unida a la tradición, a la cultura y a la gastronomía es con fuerza un buen reclamo turístico tanto para los propios alfareños como para los visitantes. Con ese objetivo, Ayuntamiento, bares y restaurantes, colegios y diversas asociaciones locales se dieron la mano para organizar este sábado el Día de la Cigüeña, que se vivió con un espectacular éxito de participación y alegría por cientos de personas.
Por San Blas... la cigüeña verás ha sido el lema que atrajo al numeroso público a las diversas citas del sábado. La plaza de España fue el epicentro de un día que se vistió de un ambiente totalmente festivo. En el centro, un rosco gigante de 38 metros evocaba la tradición de los roscos de San Blas mientras que varios talleres entretenían y educaban a los pequeños con manualidades, juegos, etc. sobre el mundo de la cigüeña.
Y el párroco, como también es devoción, bendijo este gran rosco confeccionado por Panadería Vivo antes de que lo saborearan cientos de personas. Diez litros de huevos batidos, 18 kilos de azúcar, 15 litros de aceite, 26 litros de agua de azahar y leche y cien kilos de harina junto a limón, naranja y vainilla fueron los números de este espectacular y festivo rosco.
Y tras esta degustación, decenas de cuadrillas se lanzaron a saborear los pinchos que proponía la ruta gastronómica formada por dieciséis bares y dos restaurantes. Las calles se vistieron de un gran ambiente y todos coincidieron en el éxito del día. Una jornada en la que los colegios participaron con una exposición de dibujos sobre la ave zancuda realizados por los alumnos de Primaria que muchos visitaron mientras esperaban la salida de las visitas guiadas para conocer desde el mirador la colonia de cigüeñas en la Colegiata de San Miguel.
