El desbordamiento del Ebro ha traído consigo no sólo un torrente de agua, sino también de reuniones de diferentes entes o asociaciones. La de los agricultores y técnicos del pasado lunes en Tudela sirvió para poner en común medidas de presión y protesta ante el ejecutivo foral, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente o la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
Representantes de comunidades de regantes y propietarios de terrenos coincidieron en que es pronto para calcular daños o superficies anegadas. No obstante, Félix Bariáin, presidente de UAGN, habló de una estimación aproximada de 12.000 hectáreas en la zona de la Ribera. Él se mostró incluso más pesimista. “No lo sé, pero creo que serán muchas más de 12.000 hectáreas. Esto es terrible para muchos trabajadores, hay hortaliza de invierno y de primavera afectada y empresas que no podrán manufacturar en mucho tiempo”, dijo.
"El ejecutivo foral asegura que exigirá al Estado que permita la limpieza del río y cubra las indemnizaciones"
Durante el fin de semana, tuvo lugar una reunión de alcaldes de la zona con la presidenta Barcina en Fontellas y otra posterior del consejero Esparza con el Secretario de Estado del Agua y el presidente de la CHE. El ejecutivo foral ha insistido en su reclamación de que sea el Estado quien agilice los trámites para cambiar la ley medioambiental que permita un dragado del Ebro y quien corra con el 100% de los gastos en indemnizaciones que se presumen millonarias.
