El jurado de esta edición Des-Adarve 2022 ya ha hecho efectiva la elección de los proyectos ganadores del concurso que viajarán hasta Tudela en septiembre para preparar sus intervenciones en diferentes espacios de la ciudad. Compuesto por la arquitecta Estefanía Fernández-Cid, especialista en restauración del patrimonio; el artista tudelano Rafa Munárriz y el sociólogo y consultor cultural Javier Espinosa, contando con la asistencia técnica de los comisarios del Certamen, Mikel Pau Casado y Marta Pérez, el jurado se reunió hace unos días para valorar y seleccionar cuatro de entre las diecinueve propuestas presentadas.
Además, los artistas ganadores de esta IV edición vendrán los días 24 al 26 de junio a Tudela, en una residencia organizada por el Certamen. Así tendrán la oportunidad de conocer la ciudad y los espacios en los que en septiembre, deberán montar sus proyectos de arte efímero para disfrutarlos, junto al resto de actividades del Des-Adarve 2022. Por otro lado, los proyectos seleccionados se expondrán en las próximas semanas para que la vecindad tudelana y ribera pueda conocerlos y ver cómo los artistas pasan del papel al montaje en los espacios elegidos.
Del total de propuestas, nueve fueron para la modalidad joven y diez para la modalidad libre, de entre las cuales fueron seleccionadas cuatro que finalmente serán ejecutadas. Los cuatro proyectos seleccionados, dos en modalidad joven y dos en modalidad libre, son los siguientes:
Ecos visuales (modalidad joven), de las artistas Laura Ruiz Morote y Eva gil Donoso, para la Real Casa Misericordia.
Aunque este proyecto estaba propuesto para el claustro de la Iglesia del Carmen, el jurado ha decidido reubicarlo en los jardines de la Misericordia, por aumentar su visibilidad e interacción.
Es una intervención consistente en una serie de paneles giratorios de espejo dispuestos de manera desigual en una retícula oculta. La condición móvil de los elementos permite a los visitantes modificar continuamente el espacio, fragmentarlo, generar nuevos recorridos y ecos visuales diferentes del entorno que ya creían conocer. Se invita así a reflexionar sobre la fragmentación del espacio, en constante cambio, y sobre nuestra capacidad de intervención sobre el mismo, y sobre el entorno, para poder alterarlo.
Mediterráneo (modalidad libre), de Juan Carlos López para el Palacio Marqués de Huarte.
Esta obra es una alegoría de la situación de la emigración en el mar Mediterráneo. Para su ejecución el artista se ha puesto en contacto con la Asociación Senegalesa de Tudela que colaborarán con él en el diseño y producción.
Consiste en la creación de un manto a partir de 3.500 bolsas de 6x8cm recicladas y reciclables que, en su primera fase, se llenarán de pintura. En la segunda fase entrará en juego el espectador que las manipula por medio del tacto y la interacción. Antes de llegar al final del proceso (tercera fase) la obra pasará a estar cubierta con una capa ligera de pintura en spray, que no resistirá el empuje que ejerce la bolsa al hincharse y
destruirá la cáscara exterior, descubriendo de nuevo los pigmentos embolsados. Estás obras están vivas, en su mutación cambian la piel, dejan residuos y reclaman constantemente la atención.
¡Tan lejos…tan lejos! (modalidad libre), del colectivo Artefacto Social para el Mercado de Abastos
La propuesta de Artefacto Social implica a colectivos de la ciudad. Va encaminada en realizar una inmersión en determinadas comunidades de la ciudad para establecer un espacio de diálogo dentro del Mercado de Abastos.
Con el objeto de promover un punto de encuentro donde debatir acerca de las problemáticas de esas comunidades desplazadas, en esa ágora se dispondrán una serie de documentación, fotos, videos y objetos como muestra del recorrido realizado, ya sea por miembros del equipo o de los participantes.
Entre las actividades se propondrá la participación en la creación conjunta de una pieza dentro de uno de los patios del mercado con material ya sea del propio mercado u otros.
Lo realmente importante será la propia participación espontánea. Se instalarán fotografías y video proyecciones, utilizando paramentos y utensilios del mercado como cajas de frutas y similares. También se propondrá la búsqueda de sobrantes de materiales de construcción para su instalación en los patios del mercado.
El paisaje en la ciudad (modalidad joven), de María Esteve para el Palacio Marqués de San Adrián
Este proyecto conlleva una investigación de producción artística entorno a la experimentación del concepto paisaje. El objetivo principal de este radica en encontrar y plasmar la multitud de paisajes presentes en nuestro día a día. Para su desarrollo es primordial la búsqueda de estímulos tanto en el medio natural y como en el medio urbano, persiguiendo la unión entre la naturaleza y ciudad enlazándose en una mueva realidad paisajística.
Se construye un retrato urbano de la propia ciudad, mediante la técnica del frottage. Se toma el suelo como espacio de creación captando fragmentos que nos evoquen a las vistas aéreas, y es el ser humano quien a partir del tránsito sobre ella va componiendo el fragmento que nos ha interesado captar. Según el periodo de tiempo que se expone el soporte en el medio exterior el resultado tendrá una mayor o menor intensidad lo que genera una tensión entre lo micro y lo macro.
El trabajo de los frottage se complementa con unas piezas cerámicas extraídas a partir del arranque del registro de residuos naturales, los cuales proporcionan volumen, rugosidad y textura.
