El nuevo curso ha arrancado esta semana en Tauste (Zaragoza) sin la presencia de los 60 niños de tres años matriculados en el colegio Alfonso I. La causa de la ausencia es las obras que se están realizando en el centro para ampliar su número de aulas.
El colegio había acondicionado unas aulas alternativas en la biblioteca y en la sala de música, pero la presidenta de la asociación de padres, Patricia Larraz, ha anunciado que creen más conveniente “que los niños aguarden una semana a que las reformas estén del todo terminadas”. Según dijo Larraz el sábado, la experiencia de ver sus aulas inacabadas podría provocar en los pequeños “miedos, fobias, llantos y vómitos”.
Aunque en su momento, desde la asociación de padres se creía que las condiciones del colegio serían peores, ya que hablaban de cables colgando y ventanas sin poner, finalmente Larraz ha reconocido que “está mucho mejor de lo que esperábamos”. El concejal de Cultura y director del colegio, Javier Nuñez, ha asegurado que la escuela “cumple unas condiciones mínimas". "Tan sólo falta poner suelo blando sobre el que ya existe", ha anunciado.
En un principio, se había planteado la posibilidad de que los alumnos de cuatro y cinco años tampoco fuesen a clase para aumentar la presión sobre el Ministerio. Sin embargo, finalmente se ha decidido que vayan, “ya que en sus clases sólo faltaba por poner las puertas y la dirección del centro nos ha asegurado que durante la mañana serían instaladas” ha explicado la presidenta de los padres. Como la semana que viene se celebran las fiestas de Tauste, los alumnos más pequeños no comenzarán sus clases hasta el 26 de septiembre.
