Después de que sus 61 participantes recorrieran durante cinco sábados las localidades de Alfaro, Arnedo, Calahorra, Cintruénigo y Rincón de Soto, el VII Abierto Infantil Ribera del Ebro llegó este sábado a su conclusión ratificando que el alfareño Álvaro Bayo es una gran promesa del ajedrez riojano.
No en vano, a sus 10 años venció una categoría en la que se citaban en los tableros jugadores hasta 20. En la modalidad sub-10, el cirbonero Raúl Sánchez logró su segunda victoria consecutiva en el torneo, liderando en solitario la clasificación.
