El refranero por San Blas y el calendario alrededor de la cigüeña fueron los pretextos, por cuarto año consecutivo, para que el primer fin de semana de febrero en Alfaro se vistiera de un gran ambiente festivo. La celebración del IV Día de la Cigüeña invitó a los vecinos y a sus visitantes a hacer frente al frío siberiano con sus diversas propuestas: la ruta gastronómica por veintitrés pinchos y menús inspirados en la ave emblema de la ciudad, visitas guiadas al mirador sobre su colonia en la Colegiata de San Miguel y diversos talleres infantiles para elaborar sus propias zancudas.
La ola de frío siberiano quiso restar protagonismo a estas jornadas gastronómicas y turísticas promovidas por el Ayuntamiento con la colaboración de los establecimientos hosteleros y comerciales. Así, obligó a suspender varias visitas guiadas, los hinchables previstos para los pequeños en la plaza de España o los talleres sobre reciclaje propuestos por el grupo scout Monegro.
Pese al frío, los ánimos no se amilanaron y las barras y mesas de los bares se llenaron de personas deseando saborear las propuestas culinarias de los participantes en la ruta de pinchos. La imaginación, el uso de los productos de la tierra y una presentación cada vez más lograda fueron algunos de los halagos lanzados por los clientes.
Además, los comercios ayudaron a aumentar el ambiente alrededor de la cigüeña con un concurso de escaparates que les vistió con referencias diversas a estas zancudas y que ganó Peluquería Tanis.
Y el momento más popular de esta celebración fue en el mediodía del domingo la bendición y el reparto del rosco gigante de San Blas en la plaza de España organizado por el Ayuntamiento y distribuido por las asociaciones de Mujeres y de Amas de Casa de Alfaro.
