Cintruénigo

15 años de AJUCI (1º Parte)

Hablamos con varios de los presidentes que ha tenido la Asociación Juvenil de Cintruénigo para conocer más de cerca lo que han sido estos 15 años y lo primero que nos damos cuenta es que más que una asociación, se ha convertido en una gran familia.

Los padres de AJUCI
photo_camera Los padres de AJUCI

Era una tarde del 4 de agosto de 2003, de esas que hacían calor y los jóvenes cirboneros pasaban horas y horas en las piscinas. Por allí estaban unos jovencísimos Javier García, Vanesa Lacarra (Chiri), Raquel Garbayo, Mapi Sarasa, Casto Alvero y Verónica Sesma. Entre conversación y conversación salió la idea de crear una asociación juvenil porque “creíamos que la Peña Cirbonera no abarcaba a todos los jóvenes de Cintruénigo y pensábamos que había muchas cosas que se podían hacer”, explica Javier García 15 años más tarde en la cafetería del Hotel Alhama, uno de los primeros presidentes de AJUCI y de los padres de la asociación. Al día siguiente fueron al Ayuntamiento, hablaron con Lorenzo, coordinador cultural de Cintruénigo, y se pusieron manos a las obras. 

Raquel Garbayo, quien participó también desde el principio y estuvo dos años como presidenta de la asociación, reconoce que al principio "tuvimos muchas dificultades. Lo primero económicas porque era algo nuevo, teníamos pocos patrocinadores y colaboradores y las subvenciones eran escasas; y luego teníamos pocos medios del Ayuntamiento”. A lo que hay que añadir también que les acusaran de ir contra la Peña Cirbonera y recibieron diferentes insultos, según nos relatan García y Garbayo. "Nosotros queríamos colaborar con ellos, hacer actividades conjuntas y ayudarnos entre unos y otros, pero fue todo lo contrario.

Aun y todo, las ganas no mermaron y su primera actividad la organizaron para las fiestas de la Virgen de la Paz en 2004: una gymkana entre 4 cuadrillas. Unos pocos meses más adelante recuperaron las fiestas de la Juventud, uno de los mayores logros de esta asociación. Por si no estuvieran siendo difíciles los comienzos se complicaron aún más cuando “se nos mató una vaca en el encierro”, lamenta García.

Ajuci en sus inicios

“Al principio éramos socios nuestros primos, nuestros amigos, nuestras hermanas… el principio no fue fácil pero estábamos una serie de personas con muchas ganas” recuerda Casto Alvero, otro de los padres de la asociación y que también fue presidente de AJUCI durante dos años. "Había pocos socios porque éramos nuevos y había mucha incertidumbre de hasta dónde llegaríamos", dice Raquel Garbayo. 

"Una de las cosas que consiguió AJUCI era que ya no sólo salías con tu cuadrilla, te apuntabas a las cenas y estabas con todo el pueblo, gente de diferentes cuadrillas", recuerda Casto Alvero. Poco a poco fueron creciendo y empezaron a preparar comidas y cenas populares, noches de djs y diversas actividades. Una vez organizaron una semana cultural en la que participaron el anterior consejero de Educación, Policía Foral, hinchables en las piscinas... "todo lo relacionado con los temas saludables nos parecía importante", dice García. 

Pero una de las actividades estrellas fue el AJUCIPRIX. El concurso se celebró durante 3-4 años durante las fiestas de la Juventud y "nosotros éramos los presentadores, los jueces... nos lo trabajábamos mucho y se preparaba un gran ambiente en el que la gente se lo pasaba muy bien", recuerda Alvero. Fue todo un éxito y tanto concursantes como espectadores disfrutaban de un espectáculo diferente y cercano, que ambientaba la tarde del sábado de las fiestas.

Ajuciprix

No fue la única actividad, las tardeadas nacieron el 2008 ó 2009 con una actuación antológica del Halcón Negro. "Queríamos hacer algo antes del encierro para animar al pueblo y tuvimos la suerte de contar con el Halcón Negro que nos hizo pasar una tarde increíble", rememora Alvero. "Aquello fue memorable, impresionante. Empezó a sacar muñecos, a colgarlos por los balcones: increíble", apuntilla Diego Torrubiano, quien relevó a Casto en la presidencia.

Tras aquellos primeros años de dificultades y despegue, llegaron tiempos de crisis, donde "nos tocó quitar algunos encierros", lamentan tanto Torrubiando como Carlos Ramírez, su predecesor en la presidencia. Fueron años complicados que supieron sacar adelante con su incansable trabajo y las diferentes ideas que iban sacando como la tradición de bajar al río en San Juan. "Tras mucho trabajo logramos centralizar un sitio concreto en el río con toda la seguridad posible y con una fiesta muy buena", explica Ramírez. También se le empezó a da una vuelta al reconocimiento al joven popular, según nos cuenta David Navascués 'Molalo', otro de los presidentes que ha tenido la asociación a lo largo de sus 15 años de historias. "Hablando con Javier García conseguimos que personalidades de otras asociaciones, entes públicos y parlamentarios vinieran a entregar los premios", recuerda Molalo.

667,comida-popular-2005

Una gran familia

Todos los presidentes con los que hemos contactado reconocen que si algo ha prevalecido en la asociación es que “siempre ha habido un grupo humano espectacular", dice Ramírez. Han tenido sus discusiones y discrepancias, como ocurre en las mejores familias, pero las buenas relaciones entre todos los componentes ha sido uno de los éxitos de AJUCI. Hoy en día siguen manteniendo el contacto entre todas las juntas existentes a través de un grupo de WhatsApp. Molalo reconoce que se "ha llevado muchos amigos y gente de confianza. Ahora quedas para comer, para cenar y en fiestas nos juntamos para alguna comida; hemos formado una segunda cuadrilla". A lo que añade una de las claves de AJUCI: "allí vamos todos a una, de voluntarios, y eso se nota".

Casto y Diego también forman parte de ese grupo de WhatsApp de antiguas juntas. Alvero explica que "aunque dejas de estar en la junta, nunca dejas de estar en AJUCI porque siempre intentas ayudar y colaborar en todo lo que puedes". Aunque Javier García cree que ese ambiente familiar se ha perdido un poco. "Antes cuando había un cambio de junta nos juntábamos todos y ahora no; eso lo echo en falta", lamenta.

todos