La organización Ecologistas en Acción de Navarra otorga este año el Premio Chandrío al Ayuntamiento de Tudela, gobernado por Navarra Suma, por “su falta de sensibilidad y su mala gestión medioambiental”, según explican. Este premio se concede a la persona o institución que ha tenido la acción más negativa para el medio ambiente, y es elegido mediante votación entre los miembros de la organización.
El Ayuntamiento de Tudela ha sido “galardonado” con este premio debido a diversas prácticas y proyectos que han generado preocupación entre los integrantes ecologistas. Uno de ellos es el proyecto del Corredor Verde, el cual ha sido denunciado por no ser realmente verde ni sostenible. Además, se ha criticado la constante tala de árboles, lo que lleva a una destrucción progresiva del entorno natural de la ciudad.
Otro aspecto señalado es la tendencia a llenar la ciudad de hormigón, como se ha evidenciado en la Plaza del Padre Lasa, sin tener en cuenta las necesidades de adaptación al cambio climático. La privatización y destrucción del espacio público mediante la proliferación de terrazas también ha generado una queja ante el Defensor del Pueblo de Navarra, quien ha concluido que algunas de estas terrazas incumplen la ordenanza reguladora.
El Ayuntamiento de Tudela también ha sido criticado por su falta de acción ante problemas como la falta de seguridad en los entornos escolares, a pesar de recibir correos de escolares expresando su preocupación al respecto. La no aplicación del Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES), así como la falta de redacción de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), tal como exige la Ley Foral de Cambio Climático, han sido otras razones para la entrega del Premio Chandrío.
Además, se ha señalado la falta de medidas contra el incumplimiento de normativas durante la celebración del Día del Ángel, el abandono de los huertos sociales y la oposición al Plan de Recuperación y Conservación de las Aves Esteparias de Navarra. La contratación de una empresa externa para emitir un informe contrario a este proyecto también ha sido motivo de preocupación.
Por último, Ecologistas en Acción ha resaltado la negativa del Ayuntamiento de Tudela a escuchar sus sugerencias para abordar el grave problema de contaminación lumínica en el puente de piedra sobre el río Ebro, lo cual provoca la muerte masiva de efímeras cada año.
La organización ecologista hace un llamamiento a la reflexión sobre la conducta de algunas instituciones, como el Ayuntamiento de Tudela, “que en lugar de proteger y preservar los entornos naturales, contribuyen a su destrucción. En un contexto de crisis climática y pérdida de biodiversidad, se requieren medidas urgentes que el Ayuntamiento de Tudela ha rechazado adoptar” explican desde Ecologistas en Acción.
