Para aquellos que busquen tranquilidad y contacto con la naturaleza lejos del agobiante ruido y trajín de la ciudades, Fustiñana es el lugar ideal, los parajes que la rodean así como otros parques naturales que se encuentran próximos a esta localidad ribera ofrecen una gran variedad de lugares para el retiro, la meditación y entrar en conexión con la naturaleza.
A su alrededor existen cientos de lugares de interés cultural y parajes para el descanso, como El Parque Natural del Moncayo, Los monasterios de La Oliva y Veruela, así como innumerables castillos como el de Cortes, Olite, Trasmoz, Marcilla, o Javier, entre otros.
Para los más aventureros y buscadores de experiencias alternativas existen muy próximos a la villa, desde parques de atracciones, hasta bodegas de vino, pasando por actividades de deporte y adrenalina.
Fustiñana disfruta de una localización privilegiada que convierte a la localidad en ‘La puerta de la Bardena negra’, un enclave de singular interés y en el que se encuentran parajes inigualables, especies únicas de fauna y flora, y unas rutas turísticas idóneas para descubrir su gran belleza:
Ruta ‘Monte y río’
Con una dificultad moderada, su distancia es de 14,85 km. y de una duración aproximada de 3 horas. El recorrido comienza en la zona del monte de Fustiñana atravesando paisajes estrechamente ligados a la historia geológica que llega desde el terciario. La segunda parte del recorrido se puede disfrutar de un paisaje de huerta y río.
En determinados puntos, el suelo tiene muchas piedras y, por lo tanto, se recomienda llevar calzado adecuado. Es conveniente informarse de las previsiones meteorológicas antes de entrar en zonas de los barrancos.
Ruta ‘La negra’
También de dificultad moderada y con una distancia de algo más de 22 km., se necesitará 4 horas y media para completarla. El punto de salida es la calle Julián Gayarre (junto a la Residencia). El recorrido se inicia a través de un sendero que nos encamina durante todo el trayecto con la vista al frente y a la derecha de los picos que dominan la Bardena Negra.
Cuando hayamos recorrido unos 6 kilómetros, un letrero nos avisará de la entrada en la Bardena Negra la cual es la zona más elevada del parque Natural Bardenas Reales de Navarra. Los niveles más altos están representados por las calizas de la Plana Negra y de Sancho Abarca, que dan un relieve morfológico tabular muy característico. El medio de sedimentación de estos materiales es típicamente lacustre (perteneciente a los lagos).
Cuando llevemos unos 8 kilómetros el camino se divide en dos partes. La izquierda nos llevará hasta la carretera de Tudela-La Valareña, de la cual dista unos 3 kilómetros. En nuestro recorrido iremos por el camino de la derecha el cual nos va acercando a la plana de la Negra.
Este recorrido termina en mitad de una de las cuestas más conocidas de la zona y que es “la cuesta de la Negra”. Amantes de la bicicleta recorren estos caminos por lo tanto recomendamos al visitante esté alerta y camine siempre por derecha dejando libres los caminos para el tránsito de todo tipo de turismo. En este punto tiene su inicio uno de los ramales que desemboca en el Barranco de la Junquilla. El turista puede regresar por el mismo camino que ha venido o terminar de subir hasta llegar a la Plana de la Negra donde las vistas son verdaderamente espectaculares.
