La judoka tudelana Maika Burgaleta Úcar, directora técnica del Judo Club Ribera Navarra, se ha convertido el pasado 3 de diciembre en la primera mujer navarra en lograr el cinturón negro Séptimo Dan de Judo. Además, a sus 46 años, ha sido la más joven en conseguirlo, y una de las pocas judokas que lo han obtenido a través de la realización de un examen oficial, que tuvo lugar en Madrid. Burgaleta se examinó tras los siete años mínimos de permanencia en el Sexto Dan exigidos por la Federación Española de Judo.
Durante el pasado sábado, Día de Navarra, la deportista realizó el último curso que le restaba para completar la serie de formaciones requeridas, y superó con éxito el examen técnico y de Katas necesarios para conseguir el cinturón negro Séptimo Dan de Judo, Koshiki-No-Kata. Al tiempo que obtuvo un segundo cinturón a su elección, que fue el Goshin Jitsu-No-Kata. El examen tuvo lugar en el Polideportivo Municipal de Villaviciosa de Odón, Madrid.
La preparación que ha llevado a cabo la tudelana consistió en la realización de dieciocho cursos oficiales de tecnificación impartidos por los grandes maestros de la Federación Madrileña de Judo, así como entrenamientos semanales en el gimnasio ‘El Templo’ de Madrid con Uke, Tibor Kozma, en los últimos meses- Además ha mantenido numerosos entrenamientos diarios efectuados en su club, con la colaboración de varios de sus alumnos.
La entrega del cinturón corrió a cargo de Sacramento Moyano, única mujer española que ostenta el 9* Dan, junto a otros cuatro compañeros masculinos que completan el conjunto de deportistas en España con el citado Dan. Como colofón, al final de este acto, un compañero judoka y escultor entregó a burgaleta una de sus obras; un cinturón blanco y rojo de acero.
La judoka de Ribera Navarra seguirá portando su actual cinturón blanco-rojo, que representa a los Altos Grados (Maestros) de Judo, pero con un Dan más en su palmarés.