El Patio del Marqués de San Adrián albergará hasta el 25 de noviembre la exposición fotoperiodística ‘Descartados’ que se puede visitar de forma libre de lunes a viernes de 10:00-13:00 horas y de 16:30 a 21:00 horas. UNED Tudela inauguró ayer este proyecto fotoperiodístico impulsado por el activista Emilio Espín y liderado por el periodista Marc Espín.
Se trata de un trabajo realizado sin ánimo de lucro con el objeto de visibilizar la lucha activista y la situación de pobreza y exclusión que sufren las personas adultas mayores de El Salvador. Su andadura se inició con la edición del libro ‘Descartados’ y posteriormente se creó una exposición, escogiendo las quince fotografías más significativas del libro definidas en torno a cinco bloques temáticos: ingresos, salud, hábitat, educación y género, con textos explicativos de cada una de estas dimensiones.
La muestra fotográfica ha recorrido otros puntos de Europa y Centroamérica, llega de la mano de la asociación ONAY con la colaboración de TAU Fundazioa y el apoyo del Gobierno de Navarra.
Una lucha por los más mayores
En El Salvador rural, una de cada tres personas adultas mayores de 60 años es analfabeta, el 75 % no tiene pensión y miles sufren y mueren por enfermedades que tienen solución. Las personas adultas mayores de El Salvador están descartadas, y de ahí el título de la muestra. Pese a darlo todo por la familia, la comunidad, el municipio y el país en tiempos de guerra y durante el proceso de construcción de paz y democracia, la mayoría de las personas adultas mayores están abandonados por el Estado.
Ante esta difícil situación, las personas mayores se han organizado y no han cejado en su empeño de exigir dignidad y derechos en los diversos ámbitos de la vida. Su lucha ha permitido avances como la reciente aprobación de la nueva ley y política nacional del adulto mayor. Esta iniciativa engloba a tres organizaciones salvadoreñas: Fundación CORDES, Asociación Rural para la Tercera Edad (ARTE) y La Coalición Nacional para la Dignidad de las Personas Mayores y cuenta, además, con numerosos apoyos como el de la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú.
ONAY es una ONG navarra que el próximo año cumplirá 30 años. Actualmente trabaja en El Salvador, Guatemala y la RD Congo en áreas como la salud, la soberanía alimentaria y los derechos de las mujeres, siempre colaborando con movimientos asociativos locales pro derechos humanos.
