Estas zonas serán los únicos lugares donde podrán ir sueltos los perros en Tudela cuando, a finales de este mes, entre en vigor la nueva ordenanza que prohibe el acceso de estos animales a zonas verdes e infantiles.
En concreto, se han habilitado dos espacios nuevos para ello en el paseo de los Poetas (junto al vial) y en Tejerías, que se suman a los ya existentes en el parque San Julián y calle Mauleón. No obstante, Luis Casado admitió que todavía no son suficientes y que tienen planteado crear más en el futuro. De esta forma, el consistorio pretende reducir radicalmente las heces de los perros en la ciudad, ya que supone un importante foco de infección y un alto coste económico en materia de limpieza. El incumplimiento de esta nueva ley acarreará una sanción de entre 60 y 150€.
40 papeleras y 800 excrementos semanales
Por otro lado, la campaña-concurso "Mi perro no ensucia" se ha puesto en marcha por el Departamento de Sanidad del consistorio, acercando a los colegios, mediante charlas, la XV Campaña de Educación e Información sobre Animales de Compañía, a través de la que las veterinarias municipales que están acudiendo a los centros para concienciar a los niños de 3º y 5º de primaria.
Por otro lado, la ciudad ya cuenta con 40 papeleras específicas repartidas por calles y plazas para recoger los excrementos caninos. No son suficientes, pero hay, al menos como para que los servicios de limpieza no tuvieran que recoger las 800 cacas de perro que recogen cada semana, que suponen 450 horas de trabajo al año y nada menos que 17.700 euros anuales de gasto. Como "el que ensucia no es el perro, si no el dueño", a decir del Alcalde Luis Casado, Policía Municipal está realizando una campaña de información estos días antes de aplicar la nueva Ordenanza que es más dura en la materia.
