Compatibilizar el desarrollo del nuevo polígono industrial de La Serna de Tudela con la conservación del medio ambiente de la zona es el objetivo de un acuerdo firmado entre el Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Tudela cuyo plan de ejecucción deberá estar acabado para diciembre de 2008. Aunque el mismo ha sido presentado recientemente en Tudela de la mano de las ediles Mariví Castillo y Anichu Agüera (Desarrollo Urbano y Promoción Industrial) y Jokin Larumbe (jefe de la sección de Hábitats del Gobierno foral), su origen se remonta al año 2005 con motivo de la aprobación del PSIS del polígono de 5 millones de m2 que se está construyendo en la carretera de Corella.
Acciones del convenio
El convenio, que cuenta con un presupuesto aproximado de 500.000 euros, comprende un total de doce acciones. “Este reto no era fácil. Tudela es un área importante y en su término municipal hay desde una vega muy fértil a zonas muy estepizadas utilizadas para agricultura y ganadería. Al final, es un entorno sensible que se había deteriorado con el paso del tiempo y el uso histórico había generado un entorno con necesidades de restauracion. En este espacio es donde se establece un grupo faunístico de alta importancia, las aves esteparias”, explicó Larumbe.
Entre las medidas que se contemplan en el convenio se encuentra el abandono de tierras agrícolas y de cultivo; actuaciones para restaurar la zona de la Corraliza del Espartal (en el LIC de la balsa de El Pulguer, que ya se ha realizado), en el término de Agua Salada, así como el paisaje en linderos y zonas marginales de la zona. Además, se están recuperando corrales para favorecer la cría del cernícalo; la adecuación de las vías pecuarias y cañadas que atraviesan el polígono; la realización de inventarios de hábitat, fauna esteparia y anfibios; así como la puesta en marcha de un plan comunal en Tudela y otro de conservación y mejora de las zonas esteparias de Tudela. Todas estas actuaciones serán supervisadas por una comisión de segumiento del Gobierno de Navarra. Según apuntó Larumbe, la recuperación de esta zona podría tener consecuencias turísticas. “Estamos barajando que este entorno tan interesante y especial pueda ser promocionado a través de al red de turismo ornitológico de Navarra, del que formarían parte Montes Cierzo, El Pulguer, Agua Salada, entre otras zonas, ya que actualmente se está concentrando en ellas una fauna importantísima”, comentó al mismo tiempo que definió esta zona como términos “altamente apreciados a nivel europeo, con lo que podrían ser foco de atracción de un buen número de personas”, comentó el técnico de Hábitats del Gobierno foral.
