Pese a que el alcalde de Tudela, Luis Casado, ha transmitido “tranquilidad” y “buena voluntad por parte deSKF” a los trabajadores de KPF Tudela, el comité de empresa prefiere guardar “cautela” ante el concurso de acreedores al que está sometida la empresa en la actualidad y que amenaza con el cierre de la compañía.
Desde el comité consideran clave una mayor “implicación”, tanto por parte del director de SKF como por parte del Gobierno de Navarra. “También es acreedor de KPF, puesto que subvencionó la nueva nave, ahora inacabada, con medio millón de euros”, recuerdan.
Pese a varias solicitudes de reunión desde julio, el director de SKF, principal cliente de KPF y antigua empresa de los trabajadores, todavía no ha accedido a mantener ese encuentro con el comité. “Está bien que el alcalde nos dé tranquilidad, pero nos gustaría que el director no utilizase a intermedarios para comunicarse con nosotros”, recalcaron los diferentes representantes sindicales.
Primer contacto
Los miembros del comité de empresa señalaron que “van a seguir las movilizaciones mientras se siga dando la situación de promesas incumplidas y freno de las inversiones por parte de KPF”.
Además, explicaron que ya han mantenido la primera toma de contacto con los administradores concursales. “Nos han explicado cuáles son las posibilidades a seguir a partir de ahora y nos han comentado que no entienden cómo se ha podido llegar a este punto.
La vía de la compra “por parte de una tercera empresa que quiera instalarse en Tudela” parece “la mejor”, aunque en el comité reina la cautela. “Supondría hacer una gran inversión. Pese a que todo el mundo nos transmite optimismo, esto sigue siendo un concurso de acreedores”.
