El próximo domingo 17 de abril, tendrá lugar el acto más emblemático del Domingo de Resurrección de Tudela. La pequeña Verónica Serrano Lacalle de siete años, sobrevolará la Plaza de los Fueros interpretando la Bajada del Ángel. Tras dos años de cancelación que dejan en el recuerdo a los pequeños Aimar Sánchez y Haizea Maisterra, esta será la primera celebración multitudinaria que se realice en Tudela desde el inicio de la pandemia.
El pasado viernes, como se viene realizando desde hace 15 años, la bodega de Patxi Cambra y Pilar Arregui fue el escenario en el que Verónica hizo sus últimos ensayos bajo las instrucciones de Miguel Ángel Vallejo. Vallejo, junto a su mujer Ana María Arregui, conforman el matrimonio encargado de seleccionar y preparar a los ángeles.
Acompañada por sus padres, Virginia Lacalle y Javier Serrano, Verónica escenificó su papel sujeta del arnés para experimentar la sensación de estar colgada de la maroma por la que se deslizará para quitar el velo enlutado de la Virgen y anunciarle la Resurrección de su Hijo Jesús al grito de "¡Alégrate María, que tu hijo ha resucitado!".
Al ritmo de la Marcha Real, la niña clavó cada uno de los pasos de su guión, siempre bajo la dirección y ánimo de Vallejo. Según la pequeña, su parte favorita es el lanzamiento de Aleluyas en forma de pequeños trozos de papel, mientras que la parte más difícil es la retirada del velo a la Virgen.
Declarada de Interés Turístico Nacional, la Bajada del Ángel de este año es una de las más esperadas y anheladas de su historia.
