Las instalaciones municipales de Santa Quiteria vuelven a tener protagonismo en la capital ribera. Y es que, en el primer campo de hierba artificial que se instaló en esta zona puede verse, otra vez, un pequeño hundimiento en la zona centro del terreno de juego.
Los entrenamientos siguen desarrollándose con normalidad, así como los partidos del fin de semana, ya que, como señaló el edil de Deportes, Jesús Álava, “nadie ha venido a decirnos, ni desde la Federación, ni desde los árbitros, que aquí no se pueda jugar”. Asimismo, restaba importancia a lo ocurrido. “Ha cedido un poquito y eso es lo que hay, y nada más. Pero está totalmente estabilizado y mientras se pueda jugar es como si no hubiera pasado nada”.
Sin embargo, algunos usuarios de las instalaciones no lo ven de la misma manera. “Me parece que en poco tiempo ya se ha hundido dos veces el terreno. Dicen que no va a más, pero yo creo que está muy mal”, señalaba José Miguel Abad, cuyo hijo juega en el equipo Infantil Navarra del Tudelano. Mª Ángeles Iturre, madre también de un jugador del club blanquinegro se sorprendía al ver un nuevo desnivel. “Pensábamos que ya se había arreglado, porque al principio las condiciones eran lamentables. Al final todo lo que hace el Ayuntamiento, lo hace mal, aunque el segundo campo, de momento, se está librando”, afirmó. Tomás Andrés, entrenador del Infantil B del Tudelano lamentaba que no hubieran dado todavía con la solución. “Es siempre en la misma zona y el mismo tipo de bache y, si no recuerdo mal, cuando era de tierra también estaba ahí más rebajado. Esto, al fin y al cabo, hace años era una escombrera de ladrillos y no acaba de asentar. A la hora de entrenar o jugar, las molestias son muchas porque hay peligro. Los jugadores pequeños tienen menos riesgo, pero uno mayor pude sufrir algún percance porque va corriendo y cae como en una especie de vacío, la pierna queda más alta que el suelo”.
