Pamplona/Iruña

Luxleaks, Multinacionales y PYMES

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A principios de noviembre de 2016, el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación divulgó un extenso trabajo en diversos diarios europeos, en el cual se demostraba que las prácticas para favorecer la evasión fiscal en Luxemburgo van más allá de casos concretos como los que estaban investigando las instituciones europeas en aquellos momentos. Según los datos publicados en el caso conocido como ‘luxleaks’, al menos 340 multinacionales se han beneficiado de acuerdos fiscales favorables por las autoridades luxemburguesas que les han permitido eludir el grueso de su tributación por beneficios. Un hecho que no se puede tolerar, y mucho menos teniendo en cuenta el esfuerzo de los ciudadanos europeos y de las PYMES que mes a mes cumplen con sus obligaciones.

Actualmente, las investigaciones por parte de las instituciones europeas continúan. Prueba de ello es el trabajo que está realizando el Parlamento Europeo, a través de la comisión especial sobre Resoluciones fiscales. Esta comisión, de carácter temporal, reclama que las multinacionales desglosen beneficios e impuestos de cada país; pide una base imponible común consolidada para el Impuesto sobre Sociedades y solicita también una mejor protección de quienes destapan escándalos como ‘LuxLeaks’, conocidos como ‘Whistleblowers’. El objetivo es el avance en la unión fiscal para evitar entrar en una guerra fiscal y que tanto multinacionales como PYMES estén sujetas a las mismas reglas de juego.

En este sentido, la Comisión Europea está trabajando en un nuevo conjunto de normas vinculantes que serán presentadas la próxima semana, para frenar la evasión del impuesto de sociedades. Asimismo, planea otro movimiento que servirá para contrarrestar las prácticas fiscales injustas y, en algunos casos, ilegales, de las multinacionales. El comisario Pierre Moscovici ya prometió a los legisladores europeos nuevas medidas por parte del Ejecutivo comunitario para el 27 de enero.

De este modo, algunas de estas nuevas propuestas obligarán a países de la UE a aceptar como vinculantes un conjunto de directrices voluntarias, conocidas como BEPS, cuyo objetivo es cerrar las brechas en las reglas fiscales internacionales existentes.

También se espera que la Comisión proponga que los 28 Estados de la UE tomen como vinculantes algunas de las pautas de BEPS, que ya fueron respaldadas por los líderes del grupo G-20.

La Comisión plantea, además, proponer normas más estrictas sobre los impuestos aplicables a las sociedades extranjeras bajo investigación y en los productos financieros híbridos, a través de los cuales se pueden evitar los impuestos, debido a su complejidad.

Las propuestas de la Comisión seguirán con una ofensiva contra las ofertas que algunas multinacionales han hecho a los estados individuales de la UE, vistas como competencia desleal.

Para evitar en el futuro este tipo de acuerdos entre Estados y multinacionales, los ministros de Finanzas de la Unión Europea acordaron el pasado octubre proceder al intercambio automático de información sobre los acuerdos con las empresas multinacionales, a partir de 2017.

Pablo Zalba Bidegain

Eurodiputado navarro