Tudela

Los Auroros, Premio Olentzero

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Por su incansable labor popular en el campo músico-cultural, sin ánimo de lucro”. Esta es la razón por la que la peña Beterri, los Gaiteros de Tudela y la ikastola Argia han elegido a Los Auroros de la capital ribera como Premio Olentzero 2010.

Un galardón que fue recibido con alegría por sus componentes. “La sensación es buena, porque siempre es de agradecer que te reconozcan una labor que haces desinteresadamente, estamos encantados de la vida y muy agradecidos a los tres colectivos que lo conceden”, indicaba Luis Ignacio Jiménez, presidente del colectivo, más conocido como “Acho”. Sin embargo, la noticia del galardón se vio un poco entristecida a los pocos días con el fallecimiento del componente más veterano, José Gómara. Y no sólo el más mayor, sino uno de los artífices del grupo.

Los comienzos

A pesar de este varapalo emocional, todos los integrantes acudirán a la sede de la Beterri, sita en la calle Serralta número 2, el próximo 16 de diciembre, para recibir el premio. El segundo de su carrera, ya que, hace unos veinte años, la peña El Escudaño también reconoció su actividad.

La actualidad

La andadura de los Auroros comenzó hace 31 años “y, dentro del grupo que estábamos, uno de los que más hizo fue Javier Marín, el director, quien ha compuesto y escrito varias auroras. Es un hombre muy entregado y parte fundamental de esto”, comentaba Acho. Y es que en Navarra en general y en Tudela en particular, esta costumbre estuvo bastante arraigada hasta los años cincuenta. “Con Franco se fueron perdiendo y en 1981, junto a la rondalla Brisas Tudelanas que decidió tomar como objetivo prioritario la recuperación de las Auroras de Tudela y su canto por las calles, empezó todo”, destacaba Acho.



“No había mucha documentación, pero la información también llegó de las personas más mayores que se sabían alguna. Pero todo el mundo nos apoyó y, además de Marín, músicos de la ciudad como Paco Fernández o el ex-alcalde, José Antonio Pérez Sola, también nos hicieron alguna aurora”, recuerda. De entre todas ellas, no duda en afirmar que las más entrañables para ellos son las que entonan a la patrona Santa Ana.