Ya está todo preparado en Cabanillas para que el próximo día 15 den comienzo sus fiestas patronales en honor a San Roque. Una semana festiva que mantiene las principales modificaciones que se llevaron a cabo el año pasado en el programa como consecuencia de la crisis y que, en esta ocasión, tan sólo presentan una novedad. Se trata del cambio de fecha del tradicional reparto de calimocho que se realiza en distintos puntos de la localidad al ritmo que marca la charanga y que desde que se comenzó a celebrar, hace más de quince años, se desarrollaba la primera jornada de fiestas. “Ese día hay un DJ en la plaza y el año pasado, al hacer coincidir ambos actos, nos dimos cuenta de que los jóvenes se quedaban en la plaza. Así que hemos decidido cambiarlo al 16 para no solapar actividades y que la gente pueda participar en todo”, explicó Ana Mª Ruiz, alcaldesa de Cabanillas, quien también comentó que, de esta manera, se llena de actos una tarde que, tras la supresión de las vacas el año pasado, quedaba vacía.
El cohete, para las mujeres
Entre las medidas de ahorro puestas en marcha por el Consistorio, que ya apostó en sus anteriores fiestas por incluir el Día del Jubilado dentro de la semana de fiestas (antes se celebraba la víspera) y cambiar la jornada dedicada a las Peñas del día del cohete “que ya tiene ambiente de por sí“ al 20, se encuentra la suspensión de la comida de autoridades el Día del Patrón. “A propuesta del PSN se decidió seguir juntándonos la corporación para comer pero pagando cada uno de su bolsillo el cubierto”, explicó la alcaldesa, quien afirmó desconocer todavía si éstas serán sus últimas fiestas al frente del Consistorio. “Todavía no lo he decidido. Llevo cuatro legislaturas y hay que dar paso a otras personas, pero todavía tengo muchas ideas e ilusión por trabajar por Cabanillas. Sin embargo, también es cierto que, algún día, tiene que ser el final”, afirmó la primera edil.
La Asociación Cultural de Mujeres “Amanecer” será la encargada de lanzar el cohete de fiestas. Un reconocimiento a todo el trabajo que desarrollan junto al Ayuntamiento y que se personificará en su presidenta, Lucía Paz. “Me lo comunicó hace unos días la alcaldesa y, aunque al principio dije que no, insistió en que estábamos trabajando mucho por las mujeres y que lo tenía que tirar”, comentó Paz. Aunque todavía no sabe que dirá a sus vecinos, algo que “dependerá de lo nerviosa que esté”, sí que tiene claro que quiere estar acompañada por sus compañeras de junta y que, en ese momento, “tendré un recuerdo para todas aquellas personas que son maltratadas, ya que no hay derecho a que les hagan eso”, matizó esta cabanillera de 63 años.
