Corella

La Ribera, un referente en cultivo de chopo en el Valle del Ebro

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La excelente calidad de la madera de chopo y la rentabilidad económica de su producción, el futuro prometedor del cultivo de este producto forestal, que genera unos ingresos de un millón de euros al año en la Zona Media y Ribera, y sus virtudes para conservar el medio ambiente son algunos de los temas que se trataron en Valtierra en el marco de las I Jornadas sobre Populicultura celebradas recientemente. Organizadas por la Asociación Forestal de Navarra (FORESNA) y sus homólogas en La Rioja y Aragón, reunieron a más de un centenar de productores y los más prestigiosos expertos en la materia. Una asistencia que el gerente de FORESNA, Juan Miguel Villarroel, consideró “escasa”, siendo este el único aspecto de las jornadas menos positivamente valorado.

Las plantaciones de chopo, consideradas desde siempre, según Villarroel, “como el hermano pobre de la producción forestal es en realidad uno de los mejor pagados y en un futuro va a ocupar superficies que hoy ocupan plantaciones agrícolas. El chopo se paga y se demanda y en un futuro se va a demandar más y ganará dinero el que se dedique a él y lo gestione bien”. Pese a ello, el cultivo de esta especie arbórea soporta también algunas dificultades, como el excesivo canon que exige la CHE a los productores, y que constituye una vieja problemática sin resolver de la que también se habló en las recientes jornadas.

Del mismo modo, se abordó la contribución de las choperas a la conservación del medio ambiente, por sus propiedades como filtro depurador de aguas residuales y para fijar el carbono. En este sentido, durante las jornadas, la consejera de Desarrollo Rural, Begoña Sanzberro, anunció que el Ejecutivo foral va a invertir 100.000 euros para que 900 hectáreas de choperas con objeto productor obtengan el sello de gestión sostenible que en la Comunidad Foral ya poseen el resto de productos forestales. Este proceso, que culminará antes de finales de 2009, pasa por ordenar la superficie forestal para planificar correctamente estos recursos y mejorar la conservación de los montes.

En Navarra, de las 7000 hectáreas ocupadas por chopos, sólo 1.500 tienen objeto productor y se concentran en las zonas Media y Ribera, donde se generan 30.000 m3 de madera anualmente.