Comarca

La Comarca pierde un 0,49% de su población entre 2014 y 2015

Los municipios que componen el área de distribución de PLAZA NUEVA y que se engloban en las regiones de la Ribera, Rioja Baja, Tarazona y el Moncayo, Campo de Borja, Moncayo Soriano y Cinco Villas, continúan experimentando un descenso de población lento pero progresivo. La tendencia dibuja, entre el 1 de enero de 2014 y el 1 de enero de 2015, un descenso de 1.106 censados en toda la Comarca, que pasa de 225.284 a 224.178 habitantes. En términos porcentuales, la bajada supone un 0,49%.

El impacto de la crisis económica que se inició desde finales de 2007 y principios de 2008 se mantiene latente en términos demográficos. Pese a los signos de recuperación a nivel macroeconómico, no existen valores tan positivos en lo que al crecimiento poblacional se refiere, debido a muchos factores de diversa índole, aunque intrínsecamente relacionados con la falta de empleo, la consecuente fuga de talento y, además, el envejecimiento. El mayor descenso se observa en las localidades de la provincia de Zaragoza y la excepción es la Ribera de Navarra, donde crece levemente la población.

Ribera y Zona Media

En la Ribera y parte de la Zona Media, los datos de decrecimiento brotan de manera generalizada. Sorprendentemente, la comarca ha crecido desde 2014 hasta 2015. No obstante, lo hace muy levemente, apenas un 0,04% que se traduce en 47 habitantes más.

"En la Ribera, las poblaciones que más bajaron en censo fueron Cascante (2,6%), Milagro (2,26%) ; Falces (2,17%), Villafranca (1,92%) y Castejón (1,41%)"

Ese balance mínimamente positivo se fundamenta sobre todo en el impulso poblacional de Tudela, la cabeza de comarca y epicentro de la zona. La capital ribera experimento una subida de 326 habitantes, un notable 0,93%, entre enero de 2014 y enero de 2015. Los otros municipios que crecen son Murchante (2,15%, 81 habitantes más) y Cadreita (1,76%, 36 habitantes más). También creció en población, aunque apenas un 0,08%, Azagra, que aumentó su censo en 3 habitantes.

En cuanto a los descensos, cabe destacar los de Cascante, que baja un 2,6% y 101 vecinos, Falces, con 53 habitantes menos (2,17%), o Villafranca, que baja un 1,92% con 55 habitantes menos. Milagro es otra localidad que se sitúa en este rango, con un descenso de 76 censados, un 2,26%. Castejón también ve mermada su población, con 58 habitantes menos, lo que supone una bajada del 1,41%.

Rioja Baja

En la Rioja Baja, el descenso poblacional global es del 1%. Curiosamente, los municipios de mayor tamaño de la región sufren variaciones estadísticas antagónicas. Si en Alfaro la población desciende un 1,24% y registra 120 censados menos que en el inicio de 2014, Autol experimenta un crecimiento de porcentaje similar. Concretamente, un 1,37% que arroja la cifra de 60 habitantes más, traspasando el umbral de los 4.400 vecinos.

"Algunos municipios de tamaño medio de la provincia de Zaragoza  como Gallur, Mallén o Sádaba, sufrieron descensos de población superiores al 3%"

Uno de los municipios de la zona que vive un descenso más acusado es Cervera del Río Alhama, que ve como su censo baja un 3,31%, pasando de 2.510 a 2.427 habitantes en sólo un año. Aunque su población es notablemente menor, Igea desciende aún más, un 4,97%. Municipios pequeños como Valdemadera o Villarroya no cambian su censo y otros de menos de 100 habitantes, como Muro de Aguas, aumentan el suyo levemente.

Provincia de Zaragoza

La estadística más generalizada en las localidades de la provincia de Zaragoza se ceba en parte con aquellas que cuentan con más de 1.000 habiatntes. La mayoría de ellas viven un descenso notablemente agudo en su censo, con casos más acuciantes como los de Sádaba (baja un 3,84% y 56 habitantes), Mallén (descenso de 107 habitantes, un 3,15%) y Gallur (bajada del 3,02% y 84 censados).

Tarazona, cabecera de comarca, sufre un descenso bastante importante para su tamaño, en concreto del 0,97%, y regisra 107 censados menos a 1 de enero de 2015 que en la misma fecha del año anterior. Por su parte, Ejea de los Caballeros experimenta una bajada de 116 habitantes en su censo, un 0,69%, mientras que Borja es uno de los municipios que menos variación registra, perdiendo tan sólo un habitante con respecto a 2014 y quedándose en una población total de 4.930 personas.

Soria

La zona del Moncayo soriano, una de las más rurales de toda la Comarca, arroja datos de descenso de población en la práctica totalidad de los municipios que la forman. Solamente dos pueblos de pequeño tamaño como Matalebreras y Beratón aumentaron su censo, concretamente en un habitante, en el año natural entre enero de 2014 y enero de 2015.

Del resto, cabe destacar el importante porcentaje de bajada de habitantes que registra Ólvega. De las dos localidades más importantes en población, es la que sufrió más los datos de la tendencia descendente. Entre el 1 de enero de 2014 y el 1 de enero de 2015, Ólvega perdió una carga de 99 habitantes, lo que supone un 2,6%. El otro municipio de referencia de la zona, Ágreda, baja un poco menos. Concretamente, un 1,01% y 31 censados en un año.

Entre las localidades de menor tamaño, resalta el descenso del 26,32% en Valdeagua, un municipio que pasó de contar con 19 censados a principio del 2014 con 14 en enero del pasado año. Otros ejemplos que muestra como algunos pueblos bajan de su umbral habitual de los últimos años son Cigudosa (descenso del 12,5% y menos de 30 habitantes) o Aldehuelas, que bajó ya de los 70 censados (68 y un descenso del 9,33%).

Mario Gaviria: “Después de los 50 mejores años de desarrollo de la zona, desde 2007 hay estancamiento”

El sociólogo Mario Gaviria, natural de Cortes y reconocido por su trayectoria a nivel nacional e internacional, es también una de las personas que mejor conoce la realidad socieconómica de la zona. En su opinión, los datos del censo de la Ribera y sus regiones colindantes responden a una tendencia que se viene dando especialmente desde el año 2007, cuando la crisis económica comenzó a irrumpir en la sociedad.

“Algunas comunidades autonónomas como Navarra y, en consencuenia, subrregiones como la Ribera, vivieron entre 1957 y 2007 la mejor época de esplendor, desarrollo y crecimiento. Desde entonces, podemos decir que la Comarca se encuentra muy estancada”, afirma el cortesino.

Para Gaviria, existen dos causas que influyen de forma muy directa en estos datos. “Uno es evidente, y es que la población va envejeciendo poco a poco. La otra tiene que ver con los inmigrantes. Algunos de los que llegaron desde Perú, Ecuador o Colombia ahora están regresando a sus países, porque encuentran condiciones de trabajo prácticamente iguales o mejores que las de España”, afirma. “Si a eso sumamos que el talento joven emigra por necesidad, los datos no tienen muchos visos de mejorar. El 0,49% es un porcentaje para preocuparse por la proyección que tiene a 10 o 20 años”, añade el sociólogo cortesino.