Agricultores de la Ribera afectados por las indundaciones provocadas por las crecidas del río Ebro no están dispuestos a pagar por el arreglo de las motas y diques que están rotos o dañados desde la avenida del pasado 20 de enero
y de cuya reparación se desentendió el viernes la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) tras
la reunión que mantuvo su presidente, Xabier de Pedro, con el consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local de Navarra, José Javier Esparza, junto a representantes
de 18 municipios navarros del tramo medio del Ebro afectados por las crecidas producidas en los últimos meses.
Así lo han afirmado los presidentes de las comunidades de regantes y sindicatos de riegos afectados, tanto en Navarra como en La Rioja y Aragón, que no han ocultado su malestar y enfado por esta decisión de la CHE, que aseguran que es la responsable de los diques, además del propio Ministerio de Medio Ambiente, garante de las Confederaciones Hidrográficas.
Entretanto, el Gobierno de Navarra, a través del consejero, se ha comprometido a adelantar el 50% del coste de unas reparaciones que nadie quiere comprometerse a realizar, además de seguir dependiendo en esta época del año del nivel del río Ebro, debido al deshielo y a las lluvias de la estación primaveral.
El problema requiere una solución que nadie afronta.
