Tudela

Florette Agrícola invierte 4,5 millones en el Proyecto MILCA

Proximidad con Milagro

La decisión de llevar a cabo el proyecto MILCA vino motivada por los cambios experimentados en unos hábitos alimenticios cada vez más exigentes y exquisitos. Tanto en la restauración de autor, como en las ventas en las grandes superficies, se venía apreciando una mayor demanda de ensaladas a base de brotes tiernos, frente a las tradicionales.

El Grupo Florette, líder europeo en el segmento de la cuarta gama, cuenta en España con la filial Florette Agrícola, productora de las materias primas, y Vega Mayor, transformadora y comercializadora de productos. La adquisición de la empresa navarra por parte de la multinacional francesa se produjo en el año 2001.

1.500 toneladas al año

Florette Agrícola tomó la iniciativa de llevar a cabo este proyecto en 2009 y diseñó un plan para incrementar considerablemente su capacidad de producción de este tipo de hortalizas. Las obras comenzaron en 2010.

La decisión de construir los invernaderos en Cadreita vino motivada por la proximidad con la planta de elaboración de Vega Mayor en Milagro.

Precisamente, la rápida evacuación de los productos a la planta transformadora resulta clave para mantener las idóneas condiciones organolèpticas.

El segundo motivo por el que se decidió construir los invernaderos cerca de Milagro fue minimizar el impacto del coste del transporte.

Objetivos

El potencial de producción de esta instalación, una vez completado el proyecto de construcción y puesta en marcha de los seis módulos, es de 1.500 toneladas al año de hojas jóvenes o "baby leaves", como se les conoce en inglés.

Las principales variedades que se producen son rúcula, canónigo, lechugas de distintos colores, espinaca, en definitiva, una amplia gama.

También en Murcia

Los objetivos que persigue la empresa con el proyecto MILCA es asegurarse el suministro de esta materia prima, dadas sus características diferenciales y especiales con respecto a lo que son las ensaladas o las verduras adultas.

La fragilidad de las “baby leaves” exigen un control más exhaustivo y riguroso que asegure la calidad del producto.

Los ciclos de la recolección varían entre 30 días en verano y 100 días en invierno.

La infraestructura está dotada y automatizada con una tecnología mecanizada para la siega, recolección y riego.

La mayor parte de la producción de estos invernaderos va destinada al mercado ibérico, España y Portugal (entre el 80 y el 85 por ciento), mientras que entre el 15 y el 20 por ciento restante se destina a otras fábricas del Grupo Florette en Europa, sobre todo a Francia, pero también a Italia e Inglaterra.