La Semana Santa comenzó en la capital de la Ribera con la Pasión el miércoles día 23. El buen tiempo, aunque amenazaba lluvia, permitió ver la procesión del Santo Entierro de Viernes Santo al numeroso público que se concentró en su recorrido. Después del pregón en verso que dedicó Miguel Sanz a los tudelanos, se volteó el sábado al Volatín, vestido este año de enfermero por su modista particular, María Teresa Garijo Satrústegui -que se jubila de esta labor y será reemplazada por Ana Gil Jimeno en 2012-, y los balones de la Orden del Volatín se lanzazon desde la residencia Nuestra Señora de Gracia porque las obras en la Casa del Reloj no están terminadas del todo.
Para culminar el puente, la plaza Nueva se quedó pequeña para el, ya famoso, Vuelo del Ángel -este año, personificado por Pablo Mata Sanz- al que prosiguió una animada romería en la que grupos de jóvenes y animados talluditos con pequeños se escaparon a comer al campo.
