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Héctor Pérez, propietrario del estudio fotográfico de Tarazona Foto Ángel, lleva veinte años creando recuerdos para los novios el día de su boda. “No tenemos limitada una zona geográfica de trabajo, nos desplazamos a toda España. Donde nos solicitan ahí estamos, aunque a partir de los 100 ó 200 kilómetros cobramos un extra por el desplazamiento. Lo que más se lleva actualmente son los álbumes digitales de diseño que consisten en un álbum encuadernado de unas 30 páginas maquetadas como una revista, con todo fotografías a las que, si se quiere se puede añadir texto, más el reportaje con diferentes tamaños. Lo habitual es quedar un poco antes en casa de la novia, ya que los novios suelen ser más reacios a hacerse fotos antes de la ceremonia. Luego están las fotos por el paseo urbano, las calles de la localidad, combinado con jardín o bien en el restaurante, si lo tienen bien acondicionado, o localizaciones específicas significativas para los novios. Me ha tocado hacer fotos en castillos antiguos con decoración de época y en una laguna de difícil acceso a la que tuvimos que ir en un 4x4 y luego campo a través. En cualquier sitio hacemos fotografías, y en el caso de que alguna pareja repita la localización, cambiamos el ángulo para que sean diferentes”.
“En cuanto al álbum cada año salen novedades como las páginas con olores a chocolate, canela o fresa. Diferentes materiales para la fotoportada como el metacrilato, la madera o la chapa y distintos formatos que pueden ser cuadrados o triangulares y semicirculares que se convierten en cuadrados y circulares cuando los abres respectivamente. Los reportajes de boda son una buena experiencia en mi trabajo porque compartes con tus clientes momentos muy especiales”.
