Tudela

Compromisos de la cumbre navarro-aragonesa

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“Tudela es hoy capital de Navarra”. En esos términos se expresaba Uxue Barkos, presidenta del Gobierno de Navarra, en el inicio de su balance de la reunión mantenida con su homólogo aragonés, el socialista Javier Lambán. Dos presidentes como quien dice recién estrenados en sus respectivos cargos y que calificaron su encuentro como una reunión de trabajo de la que saldrían mimbres de una relación institucional que estará marcada por la “sintonía entre ambos equipos”.

Más allá de las fotografías y las frases para la posteridad, lo cierto es que la ocasión se presentaba como ideal para hacer ver que, de una vez por todas, tanto Zaragoza como Pamplona miran a Tudela y su Comarca como el punto estratégico que atesora potencial pero nunca lo ve concretado. Fueron varios los temas en los que ambos mandatarios trasladaron su voluntad de trabajo y guiñaron el ojo a la Ribera de Navarra y también a otras zonas como la Comarca de Tarazona y el Moncayo, que, en palabras del propio Lambán, merecerá “una atención especial en el aspecto de la generación de empleo y las inversiones industriales”. Barkos también manifestó su preocupación por el alto desempleo en la Ribera.

Corredor atlántico

Barkos y Lambán coincidieron en la necesidad de que Navarra y Aragón adopten un papel protagonista y apuntalen su presencia a través de las comunicaciones y la logística en el llamado corredor mediterráneo-atlántico y también dejaron entrever que aunarán esfuerzos en lo que a desarrollo y potenciación conjunta del sector agroalimentario se refiere. En los temas concretos, que afectan a la Ribera, no faltaron el Canal de Navarra, la N-232 o las riberas del Ebro.

Consolidar el desdoblamiento de la N-232 y revisar el peaje de la AP15

Uxue Barkos y Javier Lambán coincidieron en admitir que tener más de 20 kilómetros de línea continua en la principal vía que comunica el sur de Navarra con Zaragoza “no es razonable”. El desdoblamiento de la N-232 fue uno de los temas que ambos presidentes hablaron en la reunión y Uxue Barkos mostró la disposición del Gobierno de Navarra a colaborar y apoyar cualquier requerimiento que haga el Gobierno de Aragón al Estado en ese sentido. Para Lambán, “la N-232 sigue siendo una prioridad que se ha demorado demasiado en el tiempo” en el caso aragonés. “Navarra ha respondido antes a sus obligaciones con los desdoblamientos que se realizaron en su día (Castejón-Cortes)”. Lambán mostró su satisfacción porque el Gobierno de España “quiera seguir invirtiendo”.

Por otro lado, Uxue Barkos reconoció que eliminar los peajes de la AP15 “no será fácil” por las condiciones del “contrato recientemente renovado”. “Soy consciente de que es una penalización para una parte de Navarra y el ejecutivo tiene la capacidad de encontrar fórmulas imaginativas para evitarlo”. Barkos anunció que se revisarán algunos puntos del contrato.

Trabajo conjunto con la CHE y entre gobiernos ante las avenidas del río Ebro

Tanto Barkos como Lambán aseguraron que las relaciones de ambos gobiernos con la CHE les ocuparon gran parte del tiempo de su reunión. Para ambos ejecutivos, los problemas derivados de las avenidas del Ebro en los últimos años en cultivos y cascos urbanos requieren de una solución. Barkos señaló que es estrictamente necesario “traer los ritmos, las metodologías y los mecanismos de trabajo de una entidad tan relevante como la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) a las necesidades reales de los navarros”.

Más directo y crítico se mostró Lambán al referirse a la CHE. “Debería ser un organismo bastante más eficaz y relevante, seguramente habría que revisar muchas cosas de su funcionamiento”, dijo. “Llevamos muchos años con inundaciones recurrentes de extensísimas hectáreas de cultivo y de cascos urbanos. Los vecinos que yo conozco son sensatos, no plantean actuaciones salvajes o dragados, sino soluciones razonables. Ahí puede haber una buena colaboración entre Aragón y Navarra. Hay planes que estarán casi escondidos en algún cajón y que nosotros queremos reavivar”, añadió.

La segunda fase del Canal de Navarra no se paraliza, sólo se revisa

Con respecto a las críticas de la oposición del Parlamento de Navarra (UPN, PPN y PSN) sobre la segunda fase del Canal de Navarra (que prevé su llegada a la Ribera), Uxue Barkos fue tajante: no es un rechazo sino una revisión del proyecto. La presidenta foral mandó un mensaje de tranquilidad a los regantes riberos. “Vamos a revisar algunas cuestiones relacionadas con la financiación, absolutamente desmedida como refleja el último informe de la Cámara de Comptos. Es algo que además también hemos venido denunciando desde la oposición y que vamos a pelear con uñas y dientes”, dijo, recordando que el anterior gobierno también decretó en su día la paralización de esta fase.

Continuando con su discurso conciliador, Barkos remarcó que la prioridad de su ejecutivo es “satisfacer todas las necesidades de agua de la población de Navarra y más aún de la Ribera, pero haciéndolo de la forma más óptima para todos”, aludiendo directamente a los posibles sobrecostes de los que habla Comptos. “¿Quiere esto decir que no se va a tener en cuenta a los regantes riberos? Rotundamente no”, sentenció.

Colaboración intercomunitaria en sanidad e impulso del sector agroalimentario

El impulso del sector agroalimentario entre ambas comunidades autónomas supuso quizás el tema estrella de la reunión, aunque las propuestas que salieron del cónclave Barkos-Lambán se refirieron más a la logística de infraestructuras algo alejadas de la Comarca, tales como las terminales de Zaragoza (marítima) y la de Noáin, que se quiere conectar con el puerto de Barcelona cinco días a la semana en lugar de dos, como sucede en la actualidad.

Al ser preguntada por la colaboración entre Navarra y Aragón en los protocolos de atención sanitaria entre las zonas de Tudela, Ejea y Tarazona, Barkos aseguró que apoyará todo lo que suponga “normalizar relaciones entre convecinos será positivo”. “Tenemos la obligación de atender las necesidades comunes y darle a esas necesidades comunes respuestas conciliadas y convenidas. La vocación que hemos mostrado es la de trabajar en algunos protocolos que ya están un tanto desactualizados y que han de responder, como digo, a las necesidades de la ciudadanía”, resaltó la presidenta del Gobierno de Navarra.