Los jóvenes. Ellos fueron los auténticos protagonistas de las fiestas que celebraron el pasado fin de semana Cintruénigo, Villafranca y Monteagudo.
Los primeros en dar el pistoletazo de salida fueron los de Cintruénigo, que lo hicieron en la tarde del viernes con el disparo del cohete, al que siguió una ronda de vinos y una cena popular juvenil en el frontón que estuvo amenizada con la música de un DJ. El sábado se celebró el primer encierro y el espectáculo “Ajuci Prix”, que reunió a un buen número de jóvenes en la plaza de toros. El domingo, las bombas japonesas y una traca pusieron el punto y final a las fiestas. Unos festejos que han contado con la participación de 22 voluntarios de la asamblea local de Cruz Roja de la localidad, que realizaron dos atenciones.
Monteagudo comenzó los festejos el sábado por la mañana con un almuerzo al que siguió la entrada de potros por el Camino de la Noguerilla. A pesar de que en los primeros metros los animales se dispersaron, los caballistas lograron reconducirlos y lograr una entrada agrupada que fue seguida por numerosos vecinos. Los encierros, tanto simulados como reales, centraron el resto de actos en el que también hubo café concierto y verbena.
Por su parte, en Villafranca el acto más multitudinario fue una paellada popular que se celebró en el polideportivo y en la que tomaron parte cientos de vecinos. Tampoco faltaron las vaquillas y los pasacalles, así como una actuación de percusión.
