Cebollada fue de menos a más en la carrera. Del sector de 1.000 metros de natación no salió en los puestos cabeceros, pero sí lo hizo a continuación del entonces líder virtual, Rodrigo García, después del tramo de 20 kilómetros en bicicleta. Fue el momento de comenzar su ofensiva hacia el título realizando un espectacular esfuerzo en la especialidad que mejor se le da: el piragüismo.
Cuando salió del agua, Cebollada llevaba una ventaja de unos cuatro minutos que debía defender en el tramo de carrera a pie. Había realizado un magnífico registro de tan solo 23 segundos más que el especialista Damián Vindel, piragüista olímpico en Atenas 2004 y ahora cuadriatleta y triatleta Ironman. El tudelano no se vino abajo, reguló sus fuerzas y aguantó la primera posición ante el empuje de sus perseguidores, el mencionado Damián Vindel, que fue finalmente plata, y Álvaro Sabater, que cosechó la medalla de bronce. Cebollada se proclamó campeón nacional con un tiempo de 1:49:46, sacando un minuto y medio al segundo y más de cinco al tercer clasificado.
“Todo es posible”
Cebollada estaba exultante en meta y no dudó en señalar que “no es tan importante el título nacional de esta disciplina como el hecho de lograrlo con 46 años”, concretamente 13 años después de su último triunfo en los nacionales. “Con mi triunfo y a mi edad, se demuestra que con una buena praxis deportiva, cuidando el cuerpo con una alimentación saludable, entrenado con lógica combinando entrega y moderación, pero sobre todo mucha motivación, todo es posible”, afirmó el deportista tudelano. El palmarés de Cebollada también incluye el campeonato de España en esta disciplina en los años 2001, 2002 y 2003 y varias pruebas de la Copa del Mundo de Cuadriatlón en Córcega e Ibiza. A nivel internacional, su mayor logro es el subcampeonato del Mundo de la disciplina en la República Checa, en 2001.
