Desde la Oficina Técnica del Ayuntamiento de Tudela, uno de los trabajos que se ha estado llevando a cabo a partir de la llegada del nuevo equipo de gobierno es la elaboración de informes sobre el estado de los edificios de uso municipal. El resultado de dicho trabajo se ha presentado este viernes, con datos que hablan de deficiencias en todos y cada uno de los inmuebles chequeados. No obstante, dos destacan por encima de los demás debido a las graves deficiencias que se detectaron durante la elaboración de los análisis. Uno es el centro de Infantil de Griseras, en el que se hallaron graves deficiencias en la cimentación, y el otro el centro cívico Lestonnac, donde el mal estado del tejado -conocido desde 2007- provocó el hundimiento de un falso techo y una fuga de agua ha hecho que los gastos de consumo se dispararan desde 2009. El consistorio ya trabaja en subsanar estas deficiencias aunque señala que "los imprevistos condicionarán presupuestariamente la planificación" en un corto plazo.
En el caso de Griseras, los daños que se descubrieron durante la elaboración del informe tienen que ver con la cimentación del edificio y el estado de las arquetas y las canalizaciones. Desde el departamento se informó que existían graves deficiencias y se solicitó un informe pericial y la inspección por parte de la Junta de Aguas de Tudela. Los técnicos del órgano municipal, durante su inspección, se llevaron, en palabras de la concejal de Bienestar Social Marisa Marqués, "una sorpresa" al comprobar que la tubería del centro no estaba conectada a la red general. En definitiva, las aguas fecales iban a parar sobre el propio terreno, generando un desgaste de los cimientos y una zona totalmente insalubre. "Antes de ponerse a reparar, tuvieron incluso que hacer agujeros en las paredes, porque allí no se podía respirar", ha señalado Marqués. El origen de este defecto de construcción data de 2009, cuando tras la urbanización de la calle Ribaforada, no se conectó la tubería de Griseras a la red general.
Tras subsanar dicha deficiencia en un plazo de tres días, el Ayuntamiento ha solicitado un informe pericial que servirá para analizar si existen responsabilidades jurídicas. El consistorio, además, solicitó que las subvenciones del Gobierno de Navarra para la mejora de centros educativos financiaran algunas obras necesarias al efecto. Así, tres actuaciones contarán con subvención al 65% por parte del ejecutivo foral: el refuerzo de cimentación del edificio (4.789 euros); la sustitución de canalización de fontanería (4.235 euros); y la mejora de la red horizontal de saneamiento (4.194 euros).
El caso Lestonnac
Los desperfectos hallados en el Centro Cívico Lestonnac correspondieron al tejado y a una fuga de agua que provocaba humedades y grietas en gran parte de este edificio céntrico pero muy deteriorado con el paso de los años. El 4 de septiembre de 2015 se hundió un falso techo y el Ayuntamiento se puso manos a la obra para sellar las tejas con el objetivo de evitar la presencia de aves y roedores. Para los presupuestos de 2016 estaba contemplada una partida destinada a la reforma del tejado y el falso techo del ala derecha del edificio. "Pero ese es solo uno de los problemas y por so hemos de replantear todo", ha añadido Marqués, quien ha explicado que tras recabar información a través de informes técnicos de anteriores legislaturas, se percataron de que la alerta sobre el mal estado del tejado "existía desde 2007". "Ya entonces se recomendaba la rehabilitación integral del tejado, aunque el anterior equipo de gobierno optó por el parcheado y por la colocación de una tela asfáltica, que daba problemas desde 2009", ha explicado la edil de Izquierda-Ezkerra. Finalmente, el consistorio acometerá la rehabilitación integral del tejado.
Lo deterioros en Lestonnac no acaban ahí. En 2009, el consistorio pidió un informe a Entecsa en el que la empresa detectó humedades y en el que también se menciona el mal estado del tejado, pero, en palabras de Marqués, no se acabó estudiando a fondo el origen de dichas humedades. Este mismo año, tras la aparición de grietas en algunas zonas, se pidió un nuevo informe a Entecsa, en el que la empresa señalaba la necesidad de localizar "una fuga de agua". "Dicha fuga de agua, desde 2009, había provocado que el gasto de consumo doblara prácticamente al de un centro educativo", ha dicho Marqués. La fuga ya se ha subsanado, aunque el consistorio está a la espera de conocer los resultados que arrojen los fisurómetros instalados para comprobar la incidencia de las grietas provocadas por la humedad.
31 edificios estudiados
Estos dos ejemplos de deterioro han sido señalados por los representantes del tripartito como "un ejemplo de dejadez en la gestión en anteriores legislaturas". El concejal de Urbanismo y responsable de la Oficina Técnica, Daniel López (Tudela Puede) ha señalado que "esa dejadez responde al desconocimiento y a una nula inversión en mantenimiento". "Los informes sobre cada uno de los 31 edificios que han llevado a cabo los técnicos de la casa, que se han dejado la piel, ni estaban ni se esperaban, y han servido para encontrarnos con el deplorable estado de las dependencias municipales", ha añadido.
Los mencionados 31 informes corresponden a edificios en uso y contienen varias partes: una evaluación técnica del edificio, un registro de desperfectos e incidencias y una ficha de mantenimiento para evitar el futuro deterioro. "La segunda fase de este trabajo es la entrega de estos informes a los diferentes departamentos del consistorio como herramientas de trabajo", ha puntualizado López, quien ha añadido que la elaboración de dichos estudios "no es cuestión de perfil técnico, sino de voluntad política".
