Sádaba retrocedió al siglo XIX para recordar al matador granadino Salvador Sánchez Frascuelo en las primeras jornadas gastronómico taurinas celebradas recientemente con la presencia de eruditos del toreo y divulgadores. Carruajes tirados por caballos a la usanza del siglo XIX, una exhibición de recortadores, roscaderos y la presentación de una vaca autóctona de Navarra clausuraron esta cita, cuya organización trabaja ya en la segunda entrega, según explica José Ángel Soto, organizador de las jornadas y responsable de la hospedería. Los aficionados al toro y el público en general, han conocido más la figura del torero de la mano de Manuel Grao, su bisnieto. Sánchez Frascuelo, al que se le ha dedicado una placa en la hospedería de Sádaba, residió siete años en la villa, trabajando de rapatán y ayudante de pastor. “Su padre y hermano están enterrados en el cementerio de Sádaba”, dice Soto.
El último día de las jornadas el público vio el marcaje de cuatro novillos y el tentado de tres becerros con ramas de olivo, a caballo y con la pica de tientas. “La respuesta de la gente y del ayuntamiento nos ha dado muchas fuerzas preparar las segundas jornadas”, afirmó Soto.
