La Ribera es una de las zonas más afectadas por la mala calidad del aire en toda Navarra, pero también a nivel estatal. Esta idea sobre la que Ecologistas en Acción ya venía alertando se acrecenta ahora con los datos que desgranan que, entre 2013 y 2015, la media de días por año de superación de niveles de ozono sobresalió con creces en la estación de medición de Tudela.
El límite legal estipulado está en 25 días de superación por cada año civil, haciendo la media en un periodo de tres años. Los 120 microgramos de ozono por metro cúbico de aire que marca la legislación se superaron en la estación de Tudela en una media de 35 días anuales. Las cifras son claras y muestran que se ha incumplido el objetivo legal de protección de la salud establecido para el ozono en la zona de la Ribera. “A partir de que se pase esa cifra, la propia legislación exige que se realicen planes de mejora de la calidad del aire, y esa es la petición formal que le hemos hecho a la consejera de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, porque la situación es preocupante”, señala Eduardo Navascués, de Ecologistas en Acción.
"La estación de control de contaminación atmosférica de Tudela ha tenido una media anual de 35 superaciones del objetivo legal de ozono entre 2013 y 2015; el límite está en 25"
Esta petición coincide con una campaña a nivel estatal en la que se busca alertar a las administraciones sobre las consecuencias de la contaminación atmosférica. La OMS estima en 1.800 los fallecimientos prematuros anuales en España producidos como consecuencia de la exposición a niveles de ozono como los registrados el pasado verano en Navarra. “El ozono troposférico es diferente a otros agentes contaminantes, porque prácticamente es invisible y de esta manera se convierte en el gran olvidado”, denuncia Navascués.
Estación medidora en entorno urbano
Como explican desde la organización, una de las características del ozono troposférico es que sus efectos se propagan a kilómetros de distancia de sus puntos de origen, los llamados ‘focos precursores’. En el caso de la Ribera, los potenciales ‘focos precursores’ son numerosos y variados: vías con alto tráfico a motor (N-232/A-68, AP-68, AP-15, N-121, N-113 y N-134), las centrales térmicas de ciclo combinado de Castejón, los grandes núcleos urbanos que la rodean (Zaragoza, Logroño, Pamplona y sus aeropuertos) o el mismo Polígono de Tiro de Bardenas.
"Creemos que es imprescindible una estación de medición urbana en Tudela"
Eduardo Navascués
Ecologistas en Acción de la Ribera
En esta línea, otra de las reclamaciones de Ecologistas en Acción es la instalación de una estación medidora que atienda a la problemática de los derivados de los NOx y los hidrocarburos emitidos por los vehículos a motor. “La legislación exige que al menos una estación medidora de cada zona se coloque en zona urbana, y en la Ribera no hay ninguna”, señala Navascués. “Tudela, por su situación geográfica y su orografía, debería contar con una estación de estas características”, añade, al tiempo que asegura que desde el Ayuntamiento de Tudela la predisposición ha sido “buena”. “En las reuniones y conversaciones que hemos mantenido con el alcalde y la concejal de Medio Ambiente nos han transmitido su voluntad de tomar medidas al respecto y esperamos la misma respuesta por parte del ejecutivo foral”.
