Pronto esta nueva señal de tráfico estará en más de 150 ciudades y afectará a más de la mitad de la población del país, delimitando nuevas zonas urbanas con restricciones. Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) de la Dirección General de Tráfico (DGT) son obligatorias desde enero de 2023 para todas las ciudades de más de 50.000 habitantes de España, así como territorios insulares y poblaciones de más de 20.000 habitantes con incumplimientos en materia de calidad del aire, lo que afecta a más de la mitad de la población.
Sin embargo, casi tres meses después de que la norma entrara en vigor, solo un tercio de las ciudades que deben implementar las ZBE en España las han activado. Las dificultades para crearlas y controlar los accesos, junto con las elecciones municipales en mayo, están retrasando su entrada en vigor. Son los propios ayuntamientos quienes deben implementar estas ZBE, delimitar sus áreas exactas y advertir de qué coches son los que tendrán permitido el acceso y cuáles serán sancionados si incumplen la normativa.
Con esta realidad actual, la DGT ha advertido de que en 2024 habrá importantes sanciones para todas aquellas ciudades que sigan sin implementar las ZBE. Por lo que las ZBE se multiplicarán en los próximos meses y, con ellas, las restricciones de circulación a millones de coches en España.
La señal R120 deberá llegar acompañada de un panel complementario en todas las ZBE, denominado S-860, donde los conductores conozcan qué vehículos y en qué condiciones pueden acceder a las áreas con restricciones. La DGT ha aprobado una nueva regulación en la última Ley de Tráfico para sancionar, con 200 euros, a todo aquel que infrinja cualquier normativa medioambiental de prohibición, como también por ejemplos las activas durante los protocolos anticontaminación. Estas infracciones ya se consideran graves.
