Tras una histórica granizada que azotó Fitero, Corella y Cintruénigo el pasado 8 de septiembre el Gobierno de Navarra ha anunciado la publicación de una Orden Foral que delimitarán los municipios afectados y, así, poder habilitar ayudas para la restauración de los daños ocasionados. La Orden Foral se basa en la Ley Foral 11/2009, que se encarga de atender a personas afectadas por catástrofes naturales en Navarra, y será presentada al Gobierno de España en caso de que se considere necesario un Real Decreto para ayudas estatales.
Este será el mecanismo jurídico necesario para poder habilitar ayudas a las entidades locales, infraestructuras agrarias y personas que se hayan visto afectadas, tal y como adelantó el vicepresidente primero y portavoz, Félix Taberna, tras la última sesión de Gobierno. Además, el Gobierno de Navarra está recopilando información sobre los daños causados por las tormentas y granizadas a través de un proceso en línea. Esta recopilación tiene como objetivo evaluar los daños en áreas urbanas y rurales, lo que permitirá determinar las líneas de ayuda adecuadas y solicitar asistencia estatal si es necesario. El Gobierno de Navarra insiste en que los bienes asegurables no son subvencionables y que las ayudas están disponibles durante todo el año, con la posibilidad de aumentar el presupuesto si es necesario.
UPN reclama medidas urgentes
Mientras tanto, en el Congreso de los Diputados, el diputado de UPN, Alberto Catalán, instó ayer al Gobierno de España a tomar medidas y declarar la zona como afectada gravemente por una emergencia de protección civil, lo que permitiría establecer las medidas y ayudas correspondientes. Catalán también preguntó sobre los contactos entre el Gobierno de España, el Gobierno de Navarra y las entidades locales afectadas.
Según Catalán, los alcaldes de las áreas afectadas han informado sobre la gravedad de la tormenta, que causó inundaciones en calles y plazas, daños en viviendas, vehículos y cultivos, afectando especialmente a la vid, olivo, manzanas, almendras y hortalizas. Catalán subrayó la necesidad de una respuesta conjunta del Gobierno de España y el Gobierno de Navarra para atender las demandas de las comunidades locales, agricultores y residentes de las zonas afectadas.
