‘Faustino’, un ejemplar juvenil de la especie en peligro de extinción águila de Bonelli, apareció muerto en un acotado de Corella a finales de enero con más de 70 impactos de perdigones. El hecho se hizo público desde el proyecto europeo AQUILA a-LIFE responsable de liberar al ave en Álava a principios de 2022. El Guarderío de Medio Ambiente del Gobierno foral alertó la semana pasada a través de Twitter de la amenaza sobre estas especies y de que seguían apareciendo ejemplares protegidos tiroteados en mitad del entorno natural. Por el momento no se ha informado de la autoría de la muerte de 'Faustino'.
El animal nació en el centro de cría en cautividad de Vendée (Francia) y había sido introducido el año pasado en Laguardia (Álava), lugar desde el que se había desplazado hasta la Ribera navarra para pasar su primer invierno. Frecuentaba los sotos del río Alhama en las inmediaciones de Corella y permanecía monitorizado diariamente por AQUILA a-LIFE mediante GPS. Según han informado, el pasado 22 de enero un cazador disparó “a bocajarro” al macho de águila de Bonelli provocándole la muerte inmediata.
En la autopsia realizada el 14 de febrero en el Centro de Recuperación de Fauna Salvaje de Ilundain (Aranguren) se confirmó que había sido acribillado con más de sesenta perdigones distribuidos por todo su cuerpo. Por lo tanto, el disparo se produjo a corta distancia y con munición utilizada habitualmente para la caza menor.
Gracias al seguimiento por GPS desde AQUILA a-LIFE en Álava dieron la voz de alarma el mismo día del suceso y avisaron al Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Navarra. Al día siguiente los Guardas de Medio Ambiente de Tudela se personaron en las coordenadas indicadas por el emisor y constataron la muerte de ‘Faustino’, procediendo a levantar el cadáver y a trasladarlo para su autopsia.
Una especie en peligro
El águila de Bonelli es una especie catalogada ‘En peligro de extinción’ tanto en Navarra como en País Vasco, por lo que el Servicio de Patrimonio Natural de la Diputación Foral de Álava, en colaboración con otros organismos y entidades, lleva años desarrollando programas de reforzamiento poblacional para la recuperación de la especie, incluidos los proyectos LIFE Bonelli y AQUILA a-LIFE, ambos financiados por la Unión Europea. ‘Faustino’ es el cuarto ejemplar de los seis juveniles de águila de Bonelli que fueron introducidos en 2022 en la Rioja alavesa que ha sido recogido muerto junto a ‘Negu’ que murió ahogado, ‘Benterana’ que chocó contra el vallado de una balsa y ‘Benedicto’ que colisionó en un parque eólico.
Las águilas de Bonelli sufren una elevada mortalidad juvenil durante su primer año de vida, lo que ha contribuido a su rarificación y extinción en buena parte del norte de la Península Ibérica. Las principales causas de mortalidad en el alto valle del Ebro son la electrocución, la colisión y la depredación natural. Pero las muertes asociadas a la actividad humana, como la caza, además de constituir un delito medioambiental resultan particularmente crueles. Se da la circunstancia de que en 2018, otras águila de Bonelli introducida por la Diputación Foral de Alcaldía en Kanpezu fue tiroteada en Navarra. En otras palabras, dos de los 36 pollos de águila de Bonelli liberados en Álava han sido abatidos en cotos de caza navarros.
