Ahora este patrimonio inmaterial de la ciudad es el protagonista de una exposición permanente en el Espacio Cultural San Atilano del municipio. Antigua iglesia y casa natal del patrón de la ciudad, ubicado en el corazón de la ciudad medieval, el barrio amurallado de El Cinto.
La muestra tiene un carácter divulgativo y es accesible a todos los públicos. Se podrá visitar de viernes a domingo hasta el 30 de diciembre, y fuera de dicho horario concertando visita guiada con la Fundación Tarazona Monumental.
Esta exposición trata del “Patrimonio Vivo”, una categoría muchas veces olvidada o que por su carácter intangible es difícil de mostrar y poner en valor. La UNESCO define Patrimonio Cultural Inmaterial o “Patrimonio Vivo” como “las prácticas, expresiones, saberes o técnicas transmitidas por las comunidades de generación en generación”.
El primer objetivo de la muestra es divulgar lo más representativo de esta comunidad para concienciar del papel ciudadano en su conservación. Este patrimonio, al igual que el patrimonio material, requiere de un cuidado y protección que garantice su mantenimiento, y este es trabajo de las personas que forman parte de una comunidad y cuya misión para salvaguardar este patrimonio es participar de él, ya sea desde asociaciones, cofradías, hermandades, incluso con la mera asistencia y conocimiento de este patrimonio tan presente en nuestras vidas, y a la vez tan desconocido.
Así mismo, también tiene un objetivo turístico, ya que esta exposición permite dar a conocer a los turistas lo más valioso de la cultura turiasonense, su tradición e idiosincrasia. Y permite dar uso a un espacio monumental como es la antigua iglesia de San Atilano, enclavada en el corazón del barrio medieval de El Cinto.
La UNESCO divide el patrimonio cultural inmaterial en varias categorías, no siendo todas ellas imprescindibles para considerarse una manifestación patrimonio cultural inmaterial. Estas categorías son:
- Conocimientos tradicionales sobre actividades productivas.
- Creencias, rituales festivos y otras prácticas ceremoniales.
- Tradición oral y particularidades lingüísticas.
- Artes del espectáculo, juegos y deportes tradicionales.
- Manifestaciones musicales y sonoras
- Formas de alimentación.
- Formas de sociabilidad colectiva y organizaciones.
A través de estos criterios se ha definido lo que es el patrimonio inmaterial de Tarazona, fruto de una exhaustiva investigación y de la colaboración de la población a través de asociaciones, cofradías, hermandades y otras agrupaciones.
El montaje expositivo está estructurado en ámbitos y temáticas y cuenta con una importante selección de bienes muebles: obras de arte, objetos, indumentaria, instrumentos… Que han sido aportados por el Ayuntamiento o por agrupaciones culturales, para el mejor entendimiento y disfrute de este patrimonio.
Ésta es una exposición viva, y todos aquellos interesados en aportar su granito de arena a la exposición, ya sea con testimonios u objetos que representen este patrimonio, serán bienvenidos.
La implicación de los turiasonenses ha sido clave para la realización de este proyecto. “A pesar de llevar tiempo recopilando y estudiando el Patrimonio Inmaterial de la ciudad, ha sido con motivo de esta exposición cuando nos hemos lanzado a realizar una mayor labor de documentación para lo cual ha sido indispensable la participación ciudadana”, declara Lola Zueco, técnico de Patrimonio Cultural de la FTM.
Muestra interactiva con QR
Los contenidos se complementan con recursos gráficos y QR de descarga de audios, vídeos, testimonios, o la ampliación de contenidos. El discurso comienza con una sugerente introducción sobre qué es el Patrimonio Inmaterial y la importancia de la implicación ciudadana en su salvaguarda. Continúa con un calendario con todas las celebraciones de la ciudad, y más detenidamente se tratan las fiestas patronales y sus personajes, fiestas de interés como la Semana Santa o la romería del Quililay entre otras, la música, el mundo del espectáculo y la tauromaquia, la artesanía, gastronomía y el lenguaje… “En ella encontramos piezas significativas como los gigantes y cabezudos, el traje del Cipotegato, y bienes tan diversos como esculturas y pinturas, indumentaria, instrumentos, o incluso la réplica de la campana de madera del campanario de la catedral, ya que los toques de las campanas son Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”, subraya Zueco.
En 2024 se fijará un nuevo calendario de apertura para este espacio en el que la idea es seguir dotándolo de contenidos.
