Con un homenaje sorpresa en el que participaron más de cien personas, la coral y rondalla Virgen del Yugo de Arguedas y la rondalla de Aras quisieron reconocer la labor realizada por su director, Javier Resa Aguirre, durante los últimos veinte años.
Muchos fueron los vecinos que quisieron acompañar a Resa en esta emotiva jornada para la que contaron con la complicidad de su esposa, Marina Alsasua. La misma dio comienzo con la visita de más de cien personas a la casa de Javier Resa, a quien dedicaron una aurora y compartieron un desayuno en el club de jubilados. Poco después, se trasladaron hasta la parroquia de la localidad donde, ante más de 300 personas, las dos rondallas brindaron un concierto homenaje a su director. En el recital se escucharon fragmentos de obras y sonidos que el propio Resa utilizó en los conciertos que ambas formaciones han ofrecido desde que el homenajeado las creara hace veinte años. Entre ellas, hubo piezas de Barcarola, la zarzuela de los Vareadores, el coro de espigadoras de la Rosa de Azafrán, habaneras y jotas, entre otros. Además, Marisa Aguirre le dedicó una poesía.
Como en buen reconocimiento, no faltaron los regalos. El alcalde arguedano, José Antonio Rapún, fue el encargado de entregarle una insignia de oro. Por su parte, las peñas le obsequiaron con un surtido de chocolate, mientras que los componentes de las dos agrupaciones musicales le entregaron una placa conmemorativa y una semana de estancia en un balneario para el matrimonio.
