Opinión

Más obras en el Gaztambide

Hace algunas fechas me dijeron que el Teatro Gaztambide iba a tener que cerrarse y nuevamente hacer obras en su interior y me reí. De verdad que pensaba que era una broma, ¡lo prometo!. Hasta que el amigo que me lo dijo no me enseñó el periódico donde se informaba de que parte de las butacas las tenían que elevar porque la visibilidad del escenario era parcial y no tan completa como debiera, no me lo creí. Claro que después de leer la noticia no sabía si volver a reírme o llorar. De hecho poco a poco mi rostro risueño cambió y dio paso a una mueca, mezcla de indignación y estupefacción.

Y es que esta noticia ha llegado cuando todavía nuestros políticos no habían terminado de vanagloriarse y congratularse por la visita de la Reina, justo antes de finalizar el plazo para de inauguración de obras y eventos. Cuando apenas habían concluido las declaraciones en las que decían que el Gaztambide iba a marcar un antes y un después en la cultura de Tudela, que íbamos a ser referente en la Ribera, etc etc. Cuando aún estaban calientes los asientos del aforo de la inauguración con toda la pompa y boato que se pudo.

Mucho nos hemos quejado los tudelanos de la tardanza y de la desafortunada gestión de esta obra. Una obra que ha durado diez años, que ha triplicado el presupuesto, que ha sufrido un despropósito tras otro y que se inauguraba a bombo y platillo como si nada de esto hubiera pasado.

En fin que a pesar de que como dice el alcalde “únicamente no se ven los pies del artista o el suelo del escenario” o como dice la concejala de cultura “la visibilidad en estos teatros, es casi imposible” habrá que arreglar nuevamente el desaguisado y tendremos nuevas obras en el Teatro. ¡Esos sí! supongo que a los ciudadanos de Tudela no nos costará mucho acostumbrarnos de nuevo a las puertas cerradas, a obreros entrando y saliendo del teatro y a contenedores de escombros en sus inmediaiones… llevamos tantos años sufriéndolos.

Por cierto que aún nos sé el motivo de que el Gaztambide no se haya adecuado también para ver cine como antaño, algo que redundaría en la mejora de la Opera Prima tudelana que tendría un lugar más digno donde celebrarse y además amortizaría más el dinero gastado en el Gaztambide.