Tristes noticias las que me llegan desde Navarra cuando leo en los distintos medios de comunicación que, a día de hoy, parece muy alejada la posibilidad de poder seguir disfrutando de la ETB en Navarra.
Antes oíamos desde UPN que no regularizaban las emisiones por la “falta de respeto a la identidad institucional” de la comunidad y ahora el problema es el económico. La nueva excusa cuesta un simple millón de euros.
Y no digo simple porque ande sobrado de dinero, digo simple porque para otras partidas mucho más costosas y con menor demanda social, no se han puesto tantos problemas e inconvenientes como resultan que hay ahora. Parece ser que después de las ilusiones que despertaron el 3 de julio para autorizar la captación de la ETB en Navarra quedó en una comida de empresa.
La no captación de la ETB en Navarra es perjudicial para la comunidad porque, a no ser que el gobierno navarro lo cree, no tendremos ningún canal en televisión para los vascoparlantes. Y no sé si se dan cuenta pero en Navarra, en esta “Tierra de diversidad”, hay un alto porcentaje de ciudadanos que sólo disponen de la ETB1 y ETB3 para disfrutar de la programación en euskera. (ETB3, que fue rechazada por UPN en aquel primer acuerdo del 3 de julio y cuyo contenido está enfocado a un público infantil y juvenil)
