Opinión

Bardenas de nuestro corazón

Muy atrás han quedado nuestros recuerdos infantiles de cuando nuestros padres nos llevaban todos los domingos a pasar el día a la Bardena. Eso sí era tierra de congozantes y que pertenecía a los contribuyentes de los diferentes pueblos. Los diferentes derechos quedaban libres a quien los pudiera necesitar (leña, ciemo, pasto y, con un pago mínimo, la caza).

Desde entonces hasta hoy han cambiado muchas cosas en Bardenas, pero para mí a peor.

Una reserva de la biosfera ¿pero de qué? si no quedan ni saltamontes. La total desertización de los parajes de Bardenas, unido a ciertas permisividades, como la entrada de ganado, el turismo, sobre todo extranjero, los caminos y pistas. Mi pregunta y la de muchos riberos es ¿a quién interesa que esto siga así? Un proyecto de reforestación y un acotado de ganado se tendría que haber llevado a cabo hace ya 10 años y la Bardena ahora sería otra cosa, aunque fuera de pino. No tenemos que ver más que la reforestación de pino que se hizo en la corraliza de Emilio Sanz cómo está, sin dejar la del Ferial que es el único oasis dentro de Bardenas.

Muchos proyectos para salvaguardar la figura antigua de Bardenas se podían haber realizado y desde el dinero, como por desgracia, hay que acometerlos hoy. Digo esto porque lleva entrando 10 años mucho dinero en Bardenas ¿para qué? sede social, "guarderio", biólogos, repoblaciones, miradores, olivos, placas solares, las mismas placas que se podían haber utilizado para elevar agua a ciertos puntos, para riego de zonas de cobertura animal.