Sánchez tenía el Gobierno metido en un auténtico atasco debido a su mala gestión del Covid y a su política radical en todos los frentes contra el centro derecha (Eutanasia, Memoria histórica, la Ley Celaá, Ley Trans, etc.). Todos pensaban que después del verano reduciría el Gobierno y le daría un buen lavado de cara.
Aunque lo negaron por activa y por pasiva, el 4 de mayo, el “ayusazo” visibilizó su muy mala situación, en todas partes. Su Gobierno estaba muy quemado según todas las encuestas. En esa situación difícil apareció Sánchez en estado puro, ha sustituido en un plis plas a todos sus fieles por otros obligadamente fieles, sin que tan siquiera haya guardado las formas con los suyos; y con nocturnidad, tomando la iniciativa, sorprendiendo a todos.
Muchos en la derecha entendían que Sánchez estaba sentenciado, pero Sánchez es malo, pero no tonto y no son útiles los análisis lineales; hay partido y desde luego Sánchez lo va a jugar, acepta el reto. Sabe que sus aliados son los que son y no quiere ni puede buscar aproximaciones con el centro derecha. Seguirá radical.
Para ello ha remodelado en profundidad su Gobierno para:
1/ Tomar todo el poder en su partido a partir de octubre en el congreso del Psoe, nombrando ministras con capacidad de disputar a los barones díscolos las plazas de Aragón, Castilla la Mancha y Extremadura. Y para ponerlo en pie para dar la batalla electoral y recuperar a sus votantes, para que muchos no se queden en casa el día de la votación.
2/ Quitar de la primera página el tema catalán, que lo dormirá con dinero europeo y con negociaciones lentas, sabiendo que el tiempo juega a su favor, pues si no consigue dividir a los independentistas y si éstos le atacan demasiado, les podrá amenazar con que tendrán que negociar pronto con el PP.
Se puede interpretar que haya desplazado a Iceta de ministerio para no provocar más ilusiones entre los independentistas.
3/ Disputar el electorado a Podemos, que después de la salida de Iglesias parece que están en el Gobierno calentando sillones. Sánchez se ha apropiado de parte del programa que Podemos, quiere abanderarlo para no ceder votos a su izquierda. Es un papelón cómo visibiliza a los ministros “podemitas” como aprovechados.
4/ Con las vacunas y las perras europeas jugará a que se olviden los pecados anteriores.
El maná lo utilizará sin pudor, ya vemos cómo ha negociado el coche eléctrico y la fábrica de baterías y los nubarrones sobre Landaben, con el acuerdo del PNV que no ha dicho nada porque genera una debilidad estratégica para Navarra.
En vivienda ha puesto a una talibán en línea de los alquileres….
En exteriores a un profesional que corrija la postura con Marruecos..
En Interior el que tiene que rematar las condiciones para la amnistía encubierta de los etarras con el PNV y Bildu.
Hay partido y a pesar de sus esfuerzos lo tiene muy difícil Sánchez pues ha ido perdiendo mucha credibilidad fuera de sus fans, que influyen en sus fans.
