Opinión

¡Adiós dieta mediterránea!

Hemos convertido ya abril y mayo en unos meses de Fiesta, las múltiples “Fiestas de la Verdura”. Ha sido un acierto. Animan nuestras calles y plazas; invitan a participar; atraen visitantes; entretienen; enriquecen; ilustran. Pero el problema de fondo es que, salvo en los platos de algunas casas y en las manos de muchos de nuestros grandes cocinillas -chefs profesionales-, en nuestras mesas cada vez se ve menos verdura por unas razones tan evidentes como contundentes: Nuestro modo de Vida, el precio de los productos y el tiempo necesario para su correcta manipulación, están haciéndonos caer en un verde oxímoron: nos estamos alejando de la tradición. Abandonamos por momentos la demostradamente sana ‘Dieta Mediterránea’, y ello debiera preocuparnos.

No es que comamos mal, para sí quisieran nuestros hábitos en muchos países del mundo. Pero estamos abandonando y cambiando tanto cultivos como platos tradicionales y por nuestra Salud hemos de reconocerlo e implementarlo dentro de todos los saraos animados y enriquecedores que estamos montando o de lo contrario no venderemos realidad.