Opinión

Las rentas no son eternas

Es cierto que el Mundial no acaba más que empezar, pero me da la sensación de ser una continuación del ridículo de la final de la Confederaciones.

La historia de esta Selección Española, una de las mejores de la historia del fútbol, ha ido de la mano del mejor Barça, uno de los mejores equipos de la historia. Tocaron el cielo, se superaron y ahora están en caída libre. El Barça no ha sabido evolucionar en estos últimos años y ha ido bajando considerablemente su nivel; Del Bosque no ha querido verlo y ha seguido apostando por la base de un equipo en decadencia. Que todos hemos disfrutado con ese estilo es innegable, pero el cuerpo no perdona después de 6 años a un altísimo nivel. ¿Qué diferencias hay en la columna vertebral del equipo que ganó en Austria y Suiza con los jugadores que han salido hoy al campo?

Del Bosque ha preparado un equipo a base de nombre (Xavi, Casillas, Villa, Xabi, Piqué…), si no, no me explicó que hace la mitad del equipo del Barça después de la más que deficiente temporada que han hecho y encontramos tan pocos jugadores del Atlético, la gran sorpresa y el equipo más en forma que hemos visto, junto al Real Madrid.

Es una pena tener que criticar a jugadores que tanto han dado a esta Selección, pero el fútbol tiene su caducidad. Un portero que lleva año y medio sin tener continuidad en su equipo no puede ser titular, por muy Iker que se llame. Ha sido uno de los mejores de la historia, pero hoy ya no lo es. Un grave error suyo pudo costarle muy caro a su equipo en la final de Champions y en la mayoría de los goles contra Holanda podía haber hecho algo más. Nos ha malacostumbrado, si, pero si ya no está a aquel nivel, hay otros porteros.

Otra figura y quizás la que más le está haciendo daño a este equipo es Xavi. Él ponía a funcionar la maquinaria del Barça y de la selección y hoy ya no está. No tiene esa velocidad de juego que tenía y sus equipos lo padecen. Bastante significativo es que el Tata lo dejase en el banquillo en la "final" de liga frente al Atlético de Madrid. No se sabe dónde jugará el año que viene y todo apunta a un destino tranquilo para acabar su carrera; viendo estas expectativas, ¿cómo se puede pretender que esté a un altísimo nivel? El caso de Villa es muy parecido.

El doble pivote Busquets-Xabi Alonso sigue sin funcionar y merman la capacidad de uno y otro. Dos jugadores tan parecidos en un puesto en el que uno sería suficiente es comprensible para mantener el balón, no para meter gol.  Y mientras, Diego Costa, que tan diferente es a este estilo, es una isla en el ataque que ve como los de siempre se pasan el balón lejos del área rival.

La pareja de centrales, Piqué y Ramos, flojísima. Más pendientes de saludar al linier que de cubrir o correr a por sus rivales. Resultado: una sangría. Ramos acabó la temporada impresionante, no así un Piqué que llevamos ya un par de años esperando a que vuelva. En la mayoría de los goles han sido unos espectadores de lujo; si no estaban bailando, estaban mirando tranquilamente la jugada y si no protestando al árbitro.

La nota positiva es que esto no acaba más que empezar y que hay banquillo de sobra (Koke, Mata, Pedro…). Por suerte Iniesta sigue dando espectáculo y Jordi Alba es un espectáculo volar por su banda.

Y quizás deberíamos darnos cuenta de que la realidad ya no es la que era y puede que haya que buscar otro estilo que se adecue más a los mejores jugadores disponibles de la actualidad. Es el comienzo, puede quedar en una anécdota, pero urgen cambios ya si se quiere ganar la segunda estrella y hasta el momento no se se ha visto a Del Bosque por la labor de llevarlos a cabo. Veremos si rectifica, si sigue igual y nos calla la boca a muchos o si el ridículo se acrecenta.

*La crítica a este equipo no es un placer; pero igual que se les alabó cuando fueron increíbles, se puede comentar también el ridículo de hoy desde la crítica constructiva.

Iker Sesma López

Periodista