Pasadas las fiestas de 2022, hice algunas reflexiones sobre las mismas, sacando desde mi punto de vista algunas conclusiones con el fin de indicarlas de cara a la organización de las fiestas de Tudela 2023.
Hay que partir de que cada maestrillo tiene su librillo y que la concepción de las fiestas, su organización, pasa por la gestión municipal, cuestión esta, que no quita para que las aportaciones que se hagan fuera del ayuntamiento como es este caso, puedan ser recogidas para su posible realización, aunque también hay que decir que, se echa en falta la participación popular en la confección del programa,
En este sentido y como ciudadano tudelano, indicaré a grandes rasgos, algunos aspectos que a mi entender se dieron en el 2022 y que habría que en unos casos corregir y en otros anotar.
Limpieza: La precariedad existente en nuestras fiestas es palpable. Se observa poca gente para este menester. Horarios inadecuados, pocos recursos para unas fechas cuya necesidad es evidente.
Hay que redoblar esfuerzos para cumplimentar este capítulo por parte de la mancomunidad, como bien se merece nuestra ciudad, en definitiva, hay que gastarse más dinero en horas, operarios, herramientas etc. También indicar que, la ciudadanía tudelana en general tenemos que respetar este apartado. En muchas ocasiones nuestras actitudes, no ayudan a mantener la limpieza de Tudela, más aún, en días como estos. Bueno sería que desde el Ayuntamiento y la Mancomunidad se hiciera una campaña para concienciar al vecindario en este sentido.
Ruidos: Hay que aplicar la normativa y horarios señalados para estas fechas. Quizá de forma flexible y respetando las diferentes sensibilidades existentes, sobre todo en aquellas zonas saturadas en este apartado.
Seguridad: El año pasado no sé por qué motivo se trajo a policía de fuera para “vigilar” nuestras fiestas. ¿Cuánto dinero costó? ¿Por qué no se utiliza la policía Foral, Municipal y Protección Civil de nuestra zona?
Restauración: Saliendo de Tudela, todo es barato, me decía un amigo en plan jocoso. Lo cierto es que los precios de consumiciones, pintxos y demás, son altos y creo que los bolsillos en estos tiempos no están para ello.
Txikis: El ayuntamiento debe controlar en la medida que sea posible los precios de las ferias, sobre todo lo que corresponden a caballitos etc. Un viaje a tres euros para muet@s es carísimo para tan poca duración del mismo.
Peñas: Parte de la fuerza motriz de las fiestas de Tudela. No se les atiende en su justa medida. Se les subvenciona en cuanto a las actividades que se hacen fuera de las Peñas, pero las otras, por cierto, costosas que se celebran en el interior o en los alrededores de las mismas, nada de nada. ¿Para cuándo se les considerará en este sentido? Al final, llevan y mantienen la fiesta en sectores y lugares que el programa municipal no llega.
Presupuesto: No se la cantidad exacta para 2023. Calculo por informaciones publicadas que serán 400.000 euros. Poco dinero para 38.000 habitantes más la gente que se acerca a Tudela de la Ribera y otras zonas cercanas. Son 11 raquíticos euros de gasto por persona, es decir, como inversión festiva municipal, para la segunda ciudad de Navarra, y ello, sin contar con los ingresos que producen fruto de las mismas fiestas.
Otros: Creo que no se debería utilizar el cohete ni para intereses propios o partidistas. Que no se insulte a Pamplona, etc. En definitiva, que haya tranquilidad, comprensión y sencillez.
Por último, Felicitar a la participación ciudadana, es decir, a la gente en general en cuanto a su saber estar y a su aportación de ánimo, alegría y colorido, al ambiente general de nuestra ciudad.
Viva Tudela – Gora Tutera. Felices Fiestas - Jai Zoriontsuak
