El pasado viernes 12 de abril, en un abarrotado Teatro Gayarre de Pamplona, se presentó la obra de la compañía de danza contemporánea Led Silhoutte, afincada en el pueblo navarro de Lesaka. La obra se titula ‘Halley’. La sinopsis nos describe que la vida es un hilo que lo une todo, y que cada paso deja una huella en el tiempo. Sus ocho componentes lograron transmitir artísticamente a través de sus movimientos, unas veces rápidos y otras cadenciosos, esas sensaciones.
Los asistentes disfrutamos de una hora en total respetuoso silencio, ensimismados por la danza, luz y sonido que se iba desarrollando en el escenario. Un espectáculo diferente, imaginativo, pero sobre todo estético en el amplio sentido de la palabra. Los artistas hicieron alarde del tiempo y del espacio, con figuras imposibles de elasticidad, poder físico y belleza, en ocasiones auténticas esculturas humanas.
Como tudelano que nunca pierdo la ocasión de presumir de que en nuestra Tudela y Ribera hay mucho talento artístico, destacaré como particularidad que uno de sus ocho componentes es nuestro paisano: Nicolás Martínez López, a quien sin duda recordaréis por su interpretación con 10 años del “reyecito” León, en la obra del Rey León que se interpretó en el Teatro Gaztambide hace unos cuantos años, y que fue representada en su mayoría por componentes del gimnasio Fitness y otros grupos de Tudela. En aquella ocasión, “Nico” ya apuntaba maneras de artista, y a día de hoy ya es una realidad.
Siempre es una alegría para mí escribir sobre este tipo de acontecimientos. Pero en esta ocasión, doblemente, por lo que a la familia nos toca.
