Opinión

Peladilla a tanta hipocresía

Utilizando, las declaraciones despechadas de Idoia Nieves, la oposición con gran desfachatez, acusa de corrupción al Gobierno, con argumentos falsos. Exigen moralidad, cuando ellos han callado, en otras muchas ocasiones, pero todo les vale, con tal de derribar al Gobierno Barcina. No nos olvidamos de la farsa de la entrega de armas, etc.

Piensa Bildu que ha llegado su momento, empujan a que Jiménez satisfaga sus ganas de ser ¡Presidente por unos telediarios! Aducen que el Gobierno está paralizado, que no hace ¡lo que hay que hacer! ocultan la cruda realidad, que impide al Gobierno gastar lo que no tiene.

Retrasar las devoluciones por IVA, ha posibilitado no hacer más recortes, el déficit no se puede aumentar.

La izquierda quiere más gasto social, para sostener lo insostenible. Coinciden con sectores empresariales siempre colgados de la ubre de la inversión pública, arregladora de sus cuentas

de resultados. Favorecen también a los “enemigos” de Barcina, que apuestan por el pacto UPN/PSN, a cualquier precio.

El futuro mapa electoral será parecido, pero a los constitucionalistas el adelanto les pilla mal, pues al PSN no le será fácil olvidar su paso por CAN y Gobierno, y Jiménez no es el mejor.

La debilidad del centroderecha, dividido por Miguel Sanz, desprestigiado por la pésima gestión de su último gobierno y por el escándalo CAN, es muy fuerte.

No nos merecemos tener que elegir entre: una aberchalada izquierdista que se presenta con piel de cordero; y la corrupción de los cercanos. Necesitamos caras nuevas, menos peroratas y más hechos. La autocrítica pasa por desmarcarse de la avidez por el dinero fácil, de los Sanz&Cía, del exceso de endeudamiento, asegurando nuestra viabilidad económica. El adelanto electoral favorece a Bildu, evitando que haya renovación, presentándose como los únicos salvadores. ¡Menudo papelón el de Roberto!